Embalse de Arenoso, donde han salido a la luz los restos del pueblo sumergido Campos de Arenoso, en Castellón
La sequía saca a flote un 'pueblo fantasma' escondido bajo las aguas de un embalse en Castellón
Casas, masías, un Ayuntamiento y hasta el cementerio son algunos de los vestigios encontrados del antiguo Campos de Arenoso, un núcleo rural desaparecido desde mediados del siglo XX
La extrema sequía que azota a toda España se extiende cada vez más, sobre todo en zonas como la Comunidad Valenciana. La escasez de lluvias ha dejado consecuencias devastadoras en todo el territorio, desde medidas extremas en pueblos del interior a pérdidas millonarias en sectores como la agricultura y la ganadería. Pero no todo han sido malas noticias, ya que esta problemática ha sacado a relucir una joya escondida bajo el agua en Castellón.
En la provincia castellonense, la sequía ha destapado del interior de las profundidades del embalse de Arenoso, ubicado entre las localidades de Puebla de Arenoso y Montanejos, un pueblo sumergido durante décadas bajo sus aguas. Tras un período prolongado de escasez de lluvias, la presa ha bajado drásticamente su nivel y ha revelado vestigios de Campos de Arenoso.
Ruinas de casas, masías, calles y hasta un antiguo Ayuntamiento y un cementerio han recobrado vida, saliendo a la superficie. Estos son los últimos restos del pequeño núcleo rural que sucumbió ante el avance de la modernización y el desarrollo industrial a mediados del siglo XX.
Según apuntaba en su día el NO-DO, la necesidad de garantizar el suministro de agua a la zona llevó a la construcción del embalse, un proyecto que condenó a Campos de Arenoso a desaparecer bajo las aguas. Sus habitantes fueron reubicados en localidades cercanas y con el paso de los años, el pueblo se convirtió en una leyenda, un lugar que solo existía en la memoria de los ancianos.
Imagen del embalse de Arenoso, en Castellón, donde han resurgido los restos del 'pueblo fantasma' debido a la sequía
El antiguo pueblo de Campos de Arenoso, enclavado entre montañas, guarda una historia rica en tradiciones y cultura que quedó sumergida en las aguas del embalse de Arenós en 1977. Este municipio estuvo marcado por la influencia de tres regiones: Aragón, Castilla y Valencia, que moldearon el carácter de su gente y su folclore, según detallan desde el NO-DO.
Con un paisaje dominado por el Morrón y la Peña Redonda, y una economía agrícola de subsistencia, el pueblo sobrevivió durante siglos. Sus tierras pobres, mayormente dedicadas al secano, y la emigración de su población, especialmente hacia Cataluña, marcaron el declive del pueblo, que desapareció definitivamente con la construcción del embalse.
Plano del pueblo Campos de Arenoso, en Castellón, desaparecido bajo el agua del embalse
Embalses a la mitad de su capacidad
Cabe señalar que los embalses que nutren el territorio de la provincia de Castellón registran 63 hectómetros cúbicos, lo que representa un 28 % de la capacidad total que podrían llegar a almacenar, que asciende a los 221 hectómetros cúbicos. La sequía está azotando fuertemente al territorio castellonense, que ha visto disminuidas todas sus fuentes de agua, desde embalses, hasta pantanos y pozos.
La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) declaró el nivel de alerta en el mes de mayo en el sistema del Mijares-La Plana y la emergencia hídrica (fase máxima) en los del Palancia-Los Valles, y Senia-Maestrazgo. Según los datos registrados hasta esa fecha, el pantano de Arenoso ha perdido un 2,25 % de agua embalsada en un mes y ha reducido a la mitad sus hectómetros en tan solo un mes, pasando de un 57 % en mayo de 2023 a un 33 % en el mismo período este año.
Debido a esta situación, el embalse de Arenoso no es el único que ha sacado a flote vestigios del pasado ocultos bajo sus aguas. Durante el mes de mayo se deslumbraron restos de caminos, carreteras, bancales y ruinas de masías de siglos atrás en la zona del embalse del Sichar, perteneciente a la localidad de Onda.
Veto de Sánchez a la ampliación
La grave situación del Pantano de Arenoso, en particular, viene dada desde hace años, donde se ha ido reduciendo su capacidad de manera alarmante. Alrededor del mes de marzo de este mismo año, el Partido Popular de la provincia de Castellón, de la mano de Salvador Aguilella, exigió al Gobierno de España la ejecución de la ampliación del embalse, adjudicada en 2022 y que Pedro Sánchez decidió vetar negando al territorio una inversión, que los 'populares' consideran «crucial frente a la sequía».
La anulación del proyecto, que suponía un importe de 9.708.260,64 euros para ampliar hasta 100 hectómetros la capacidad de la presa, pretendía la adecuación del embalse y ampliar su capacidad de almacenaje al alcanzar una cota de 595 metros sobre le nivel del mar frente a los 592,9 actuales. Un proyecto que «el PSOE decide suspender generando un gran daño a nuestra provincia que en algunos territorios ya se encuentra en situación de emergencia por sequía», según Aguilella.
