Recreación del Nou Mestalla según el proyecto de ejecución presentado por el Valencia CF al Ayuntamiento

Recreación del Nou Mestalla según el proyecto de ejecución presentado por el Valencia CF al AyuntamientoValencia CF

Valencia  Así será definitivamente el Nuevo Mestalla: 241 millones de inversión y capacidad para 70.000 espectadores

Las obras deberán iniciarse en el plazo máximo de seis meses, en enero de 2025, y finalizarse en el plazo máximo de 30 meses

El valencianismo empieza a ver la luz al final del túnel en lo que respecta a su estadio, que ya comienza a definirse. La construcción del Nuevo Mestalla tendrá un coste de 241 millones de euros, como recoge el proyecto básico modificado y de ejecución presentado por el Valencia CF al Ayuntamiento de la ciudad.

Asimismo, este documento contempla un estadio con una capacidad máxima de 70.044 espectadores, según precisa: 22.007 en la parte baja, 16.648 en la media y palcos, 15.188 en la grada alta 1 y 16.201 en la grada alta 2. La entidad deportiva registró este proyecto en el Consistorio el pasado viernes, 11 de octubre, dentro del plazo establecido, que finalizaba al día siguiente, el sábado 12 de octubre.

Por lo que respecta al coste del futuro Mestalla, el proyecto de ejecución, consultado por Europa Press, especifica que el presupuesto de la obra ya construida «ascendería a 63 millones de euros, correspondientes a movimientos de tierras, contenciones y estructuras de hormigón, bajo y sobre rasante» y «a las licencias concedidas hasta la fecha y que habilitaron las obras ejecutadas hoy en día».

Asimismo, expone que de obra pendiente en el documento básico se estimó una cantidad que arrojaba un presupuesto de ejecución material (incluyendo gestión de residuos, seguridad y salud, y control de calidad) de 121.624.786,99 euros. Esta cantidad, sumada a la parte ya realizaba daba una cifra total de 184.624.786,99 euros, añade.

No obstante, precisa que, una vez se han definido con mayor detalle las características y mediciones de cada una de las partidas, ha habido que revisar al alza la cifra de obra pendiente de ejecutar. Así, concluye que el presupuesto revisado para la parte pendiente de ejecutar ascendería a 139.720.639.

A su vez, apunta que el presupuesto de ejecución material, general completo de la obra ascendería con esa revisión y sumando los 63 millones de la parte ya hecha a 202.720.639, 21 euros. Finalmente, indica que el PEC sin IVA o el presupuesto de ejecución de contrata final al añadir los gastos general y el beneficio industrial de la construcción asciende a 241.237.560, 66 euros.

Vista aérea del nuevo Mestalla, en Valencia

Vista aérea del nuevo Mestalla, en ValenciaEFE

El proyecto contempla una construcción de cuatro plantas sobre rasante y otras cuatro bajo rasante sobre una superficie de parcela de 69.571 metros cuadrados y con una superficie ocupada de parcela de 45.674 metros cuadrados. La superficie total construida sobre rasante se sitúa en 116.881 metros cuadrados y bajo ella de 108.101, que en conjunto suman una superficie total de 224.982 metros cuadrados. Además, se contemplan más de 770 plazas de garaje (195 más 578).

El proyecto de ejecución indica que se prevé una duración de las obras de 30 meses desde la firma del acta de replanteo e inicio de estos trabajos, atendiendo a lo indicado en la licencia concedida que establece este como el plazo máximo de duración de la construcción.

El pasado 12 de julio el Ayuntamiento de Valencia concedió al Valencia CF la licencia para poder reanudar las obras de su nuevo campo. Este permiso marcaba «condiciones muy exigentes» para que el club cumpliera con los plazos de las obras. Así, se daba al club de fútbol el plazo de tres meses que acaba el pasado sábado para presentar el proyecto de ejecución del futuro estadio.

Un plazo de ejecución de 30 meses

Igualmente, se contemplan penalizaciones para el Valencia CF si se producían incumplimientos en los plazos de construcción del nuevo campo. La administración local precisó también que «las obras deberán iniciarse en el plazo máximo de seis meses», en enero de 2025, y finalizarse en el plazo máximo de 30 meses y «no hasta 42 como pedía« el club de fútbol. Además, el consistorio resaltaba que »no se admitirán nuevas interrupciones en dichos plazos, salvo causa justificada de fuerza mayor».

En el proyecto de ejecución se señala que el Nuevo Mestalla albergará otros usos distintos al deportivo. Así, recoge que «como usos complementarios se implantan locales en bruto en distintas tipologías cuyo uso terciario será definido en posteriores licencias».

Las condiciones del Ayuntamiento

El Ayuntamiento de Valencia detalló el pasado martes que no dará al Valencia CF licencia para el terciario del nuevo estadio hasta que el club de fútbol no ingrese en la tesorería municipal el importe correspondiente al polideportivo de Benicalap. Esa es una instalación pública que debe crearse junto al nuevo estadio y que debe costear la entidad deportiva como compensación a los vecinos de esta barrio de la ciudad.

La cantidad que el Valencia CF deberá ingresar en las arcas del Consistorio son 11,2 millones de euros. Ese es el dinero que costará construir el polideportivo de Benicalap según un reciente informe realizado por la Fundación Deportiva Municipal (FDM) de Valencia con precios actualizados y con el IVA incluido.

Asimismo, el proyecto plantea que el edificio, con un proyecto complementario, posibilitaría la creación de una pista de atletismo sobre la grada baja.

Por lo que respecta al aspecto externo del nuevo campo de fútbol, se señala que «el principal cambio importante se produce en la imagen general» y habla del «desarrollo de un nuevo concepto de fachada y cubierta que, superponiéndose sobre la estructura ya ejecutada, claramente establece una diferencia respecto al anterior proyecto». En este punto, avanza que «sigue una nueva filosofía de proyecto coherente con los valores de la nueva propiedad del club».

Vista del Nuevo Mestalla

Vista del Nuevo MestallaAyuntamiento de Valencia

«El proyecto actual, sin perder un ápice de espectacularidad y manteniendo una imagen corporativa, reconocible y elegante, es un edificio más amable con su entorno, más ligero, abierto y ventilado con una mejor relación del visitante con la ciudad que le rodea», especifica el proyecto.

De este modo, habla de «una fachada permeable y abierta, construida por bandas metálicas que en conjunto crean una piel curvilínea, paramétrica y tridimensional» que «hace de telón de fondo de la imponente presencia del conjunto de pilares metálicos que sostienen la nueva cubierta ligera».

«La nueva cubierta está concebida como un sistema integral formado de cables tensados y vigas de acero. Es en sí mismo un prodigio de la ingeniería, desarrollada conjuntamente con SBP Schlaich Bergermann partner, ingeniería estructural de carácter internacional especialista en la ideación, cálculo y desarrollo de estas tipologías estructurales tan singulares», precisa el documento.

La nueva cubierta «es mucho más ligera y luminosa que la solución inicial», concluye, a la vez que dice que se ha usado «la última tecnología en este tipo de edificios para salvar unas luces estructurales enormes en tanto todas la localidades permanecen cubiertas».

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