El Gobierno de Mazón, molesto con la actitud del ministerio de Ribera tras los correos enviados por la Confederación del Júcar
El Debate accede a los correos sobre la situación de la presa de Forata y el río Magro el fatal martes que se produjo la DANA
La gestión de la DANA por parte de las autoridades es uno de los asuntos que mayor polvareda política está levantando en los últimos días. Al respecto, el Gobierno central y el de la Generalitat Valenciana se vienen cruzando reproches acerca de qué administración debería haber actuado antes para rescatar a los miles y miles de afectados en decenas y decenas de municipios que se han visto afectados por este trágico temporal en la provincia de Valencia.
Fuentes de la Presidencia de la Generalitat Valenciana trasladan su malestar por la actitud mostrada por el Departamento liderado por Teresa Ribera, quien apenas habría dado, según su versión, más que un acuse de recibo sobre el riesgo de ruptura de la presa de Forata el día en el que se desató el desastre que ha dejado más de dos centenares de víctimas mortales.
El Debate ha tenido acceso los correos enviados por el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) al Consell. Concretamente, se trata de las comunicaciones establecidas entre la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), dependiente de la todavía vicepresidenta tercera del Ejecutivo y ministra del ramo y el servicio de Emergencias de la Generalitat.
Municipios fuera de la 'zona cero'
De este modo, fue el mismo martes 29 de octubre, infausto día para los valencianos y para el conjunto de los españoles, cuando la CHJ mandó un correo electrónico a los valencianos a las 15:54 horas, señalando que según el organismo estatal «en la próxima hora se prevén caudales superiores a 1.000 litros cúbicos por segundo en el río Magro por el alivio de la presa». Esta alerta, según los subordinados de la futura comisaria europea, tan solo iba a afectar a los municipios de «Montroi, Real, Alfarp, Alcudia y Algemesí».
El desastre abarcó finalmente otras localidades como Ribarroja de Turia, Torrente, Paiporta o Masanasa, entre otras. No fue mucho más tarde, a las 17:35 cuando Emergencias, dependiendo de la Generalitat, «envía alerta hidrológica en el río Magro y Júcar a partir de la confluencia en Algemesí, algo que llevó al Gobierno de Carlos Mazón a «notificar a todos los municipios ribereños del río Júcar y del Júcar desde Algemesí hasta la desembocadura en Cullera» al «alojamiento de la población de las zonas próximas la río».
Seguidamente, es Carmen González Galán, técnico del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), quien a las 18:55 horas avisa de que le embalse de Forata «ha empezado a verter con caudales de 250 m/3 en el río Magro. En la misma comunicación, asevera que Emergencias (de la Generalitat) ya ha establecido la escenario 2 del plan especial de inundaciones en toda la provincia de Valencia, por lo que hace propio el «nivel rojo por lluvias en todo el litoral norte» y el «nivel naranja por lluvias en el interior y sur por tormentas» en la provincia.
Eso sí, la CHJ puntualiza que los avisos de las 19:30 horas se dieron de forma verbal dada la gravedad del contexto y que se dijo que se entraba en el «Escenario 3» de la presa . Aún con todo, no se decretó semejante nivel de emergencia aunque se cataloga como «límite» ante a «elevada probabilidad de rotura, resultando prácticamente inevitable que se produzca la onda de avenida generada por la avería o rotura».
En cambio, no es hasta las 19:33 horas cuando la misma persona advierte de que el embalse de Forata «está vertiendo 900,046 m3/segundo y que esta cantidad puede «llegar hasta los 1.500 m3/ segundo en el río Magro». Dicho de otra manera, el aviso por afección a los municipios por agua debajo de la presa por posibles desembalses superiores a 1.000 metros cúbicos por segundo es poco más de media hora antes de que la Generalitat enviara la alerta vía SMS a los ciudadanos después de que la recibiera por parte de los subordinados de Ribera.
En esta línea, y en el mismo documento que describe este periódico con intercomunicaciones oficiales entre el Ministerio y el Ejecutivo autonómico, es la propia Galán la que remite y notifica la «declaración del Escenario 2 del Plan de Emergencia de la Presa de Forata». A este mail «le siguen dos de la División de Seguridad de Infraestructuras» y son los mismos responsables del Miteco quienes confirman «la recepción del aviso».
El hartazgo de los agentes
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Por todo lo anterior, la CHJ fue quien avisó del estado de la presa porque tenía conocimiento de cómo estaba ante semejante situación, aunque subrayan las fuentes de la Presidencia de la Generalitat que «en ningún momento» en coreo electrónico alguno «se dice qué significa entrar en escenario 2». A tal efecto, remiten al Real Decreto 264/2021, de 13 de abril, por el que se aprueban las normas técnicas de seguridad para las presas y sus embalses.
La CHJ se defiende sobre la rambla del Poyo
Aún con todo, en concreto, dicha norma menciona en su apartado c) que el 2escenario excepcional o «Escenario 2» es aquel en el que «existe peligro de rotura o avería grave de la presa y no puede asegurarse con certeza que la situación pueda ser controlada mediante la aplicación de las medidas y medios disponibles».
Esta actitud se une a las críticas vertidas anteriormente por el Gobierno de Mazón contra la CHJ, en cuanto a la información sobre en la rambla del Poyo, que llevó al organismo dependiente del Miteco a emitir una nota de prensa defendiendo su labor.
En la misma, la JHC remarca que fue a las 12:09 cuando se produjo la «comunicación a las autoridades de Protección Civil de un caudal en el barranco del Poyo de 264 m3/segundo, que 11 minutos más tarde contactó con el «Centro de Emergencias de la Generalitat» para trasladarle «activa la alerta hidrológica en los municipios ribereños de la rambla» y que fue un a las 18:55 la «destrucción la estación de aforos por la fuerza del agua con un dato de 2.282 m3/segundo».
En este sentido, habría sido, siempre según el organismo estatal, a las 18:43 del 29 de octubre cuando se trasladó «a las autoridades de Protección Civil» que había un caudal en el barranco del Poyo de 1.686 m3/s.