​Detienen a una mujer por entrar en su casa después de que se la okupasen unos magrebíes aprovechando la DANA

Eva llevaba dos años sin poder entrar en su casa, okupada por desconocidos que tomaron la vivienda sin su permiso. Pero en Benetúser, uno de los pueblos valencianos más afectados por la reciente DANA, el desastre natural ofreció a Eva la oportunidad de recuperar su propiedad. Las fuertes lluvias obligaron a los okupas magrebíes a abandonar el inmueble, y ella, aprovechando el momento, decidió volver a su hogar para limpiar y empezar a restaurarlo con la ayuda de una amiga, según ha relatado en el programa TardeAR que dirige la periodista Ana Rosa Quintana.

Al llegar, Eva encontró su casa con la puerta abierta, llena de barro y daños causados por las inundaciones. Al no tener acceso a luz ni agua en la vivienda en la que se encontraba, decidió cambiar la cerradura y quedarse en su propiedad. «Nos quedamos en la casa porque en mi vivienda no teníamos ni luz ni agua», relató. Con la esperanza de retomar la normalidad, Eva pasó un par de días adecentando de nuevo su hogar hasta que los okupas regresaron y pidieron entrar de nuevo.

Apuntadas con una pistola táser

La situación escaló rápidamente cuando estos individuos llamaron a la Guardia Civil y denunciaron a la propietaria por haber cambiado la cerradura. La dueña describe cómo, al llegar los agentes abren la puerta a golpes y amenazándolas con una pistola táser, «no nos dejaron abrir la boca en ningún momento. Nos obligaron a salir de malas formas». De pronto, la dueña se encontró fuera de su propia casa y con una orden de detención en su contra sin dirigirse a ella para poder explicarse, solo a la okupa. «Cuando la okupa le dice que es okupa la mete dentro de la casa y a mí me dice que me va a detener», lamenta.

Por su parte, una de las mujeres que ha invadido la vivienda asegura que «yo le alquilé el piso a un chico al que no conozco», explica, mencionando que paga 350 euros mensuales sin ningún documento que acreditara el acuerdo. Eva, al escuchar sus declaraciones, señaló que se trataba de «mentiras» y que solo buscaba regresar a su propiedad, que tras haber limpiado de barro ha sido devuelta a esta familia de okupas magrebíes.