Las insuficientes ayudas a los pequeños comercios devastados por la dana en Valencia los abocan al cierre
El devastador temporal ha afectado a miles de negocios, mientras las indemnizaciones y apoyos económicos llegan con retraso y resultan irrisorios para la magnitud de los daños
Valencia lucha por superar las consecuencias de la dana que en octubre del pasado año devastó buena parte de la provincia. Las lluvias torrenciales, que golpearon con especial fuerza varios municipios, dejaron tras de sí un panorama desolador: más de 8.000 pequeños comercios afectados, de los cuales una tercera parte no volverá a abrir sus puertas, según estima la Confederación de Empresarios del Comercio, Servicios i Autónomos de la Comunidad Valenciana (Confecomerç).
Aunque las Administraciones han puesto en marcha mecanismos de ayuda, los afectados denuncian que los recursos son insuficientes y que las indemnizaciones del Consorcio de Compensación de Seguros, que muchos esperaban como tabla de salvación, siguen sin materializarse. La incertidumbre pesa sobre miles de familias que dependen de estos negocios para subsistir.
Rafael Torres, presidente de Confecomerç, explica con preocupación que las ayudas prometidas no cubren ni de lejos las necesidades reales. «El que más, unos 28.000 euros», señala, «pero calculamos que un comercio necesitará unos 150.000 euros de media para poder reabrir sus puertas». Ante esta brecha abismal entre las pérdidas y los recursos disponibles, la Confederación teme que miles de empresarios se vean abocados al cierre definitivo.
El impacto sobre los comercios locales
La dana arrasó una zona que concentra el 40 % de la población de la provincia y es la tercera área metropolitana más grande de España. Comercios familiares, mercados tradicionales y pequeños negocios se han visto especialmente perjudicados, quedando muchos de ellos en un limbo económico y administrativo.
La situación afecta al comercio y a sectores como la hostelería, que lucha por su propia supervivencia. Según Hostelería Valencia, más de 1.400 locales resultaron dañados, y entre el 20 y el 30 % de ellos podrían no reabrir. Manuel Espinar, presidente de la patronal, ha reclamado medidas urgentes como planes de rescate, financiación preferente y una mayor agilidad en la tramitación de indemnizaciones.
«El Comercio salva al Comercio»
Consciente de la magnitud del desafío, Confecomerç ha lanzado la campaña 'El Comercio salva al Comercio', una iniciativa que busca movilizar a toda la sociedad en apoyo a los pequeños negocios afectados. La propuesta, presentada esta semana en Valencia por Rafael Torres junto a Salvador Navarro, presidente de la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), y Eva Blasco, presidenta de CEV Valencia, incluye varias vías para colaborar:
1. La venta de bolsas solidarias, disponibles en comercios de la Comunidad Valenciana por un euro, cuyos beneficios se destinan íntegramente a los damnificados.
2. La incorporación del sello solidario 'El Comercio salva al Comercio' en embalajes y bolsas corporativas, como símbolo de compromiso.
3. Donaciones directas a través de una cuenta bancaria gestionada por la Fundación CEOE.
La campaña también incluye un video de sensibilización que circula en redes sociales y una página web específica para canalizar las ayudas. Inspirada en los sellos solidarios que ayudaron a reconstruir Valencia tras la riada de 1957, esta iniciativa busca unir esfuerzos más allá de las fronteras de la Comunidad Valenciana, involucrando a la sociedad española en la reconstrucción.
Por su parte, la hostelería ha solicitado medidas específicas para la reactivación del consumo, como bonos de apoyo o planes Renove para la modernización de equipamientos. También se han planteado moratorias fiscales y exenciones de alquileres para los locales afectados.
Un largo camino por delante
El Gobierno valenciano ha reiterado su apoyo a los afectados, destacando que hasta la fecha se han concedido ayudas por valor de 44,9 millones de euros, y que se trabaja en medidas como bonificaciones fiscales, liquidez a coste cero y exenciones tributarias para los comerciantes.
Sin embargo, el presidente autonómico, Carlos Mazón, también ha exigido al Gobierno central una mayor implicación, incluyendo la eliminación de la cuota de autónomos en 2025 y el IVA en las reformas de los locales afectados. En este contexto, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha presentado una propuesta legislativa que busca agilizar y garantizar la llegada inmediata de las ayudas a los damnificados.
Durante su visita a los municipios más afectados por la dana, Feijóo, arropado por alcaldes y cargos de su partido, criticó la gestión del Gobierno de Pedro Sánchez, señalando la lentitud y falta de compromiso en la ejecución de las ayudas anunciadas. Entre las medidas planteadas por el líder 'popular' destaca la obligación de que la Agencia Tributaria abone las ayudas en un plazo máximo de tres días, utilizando los datos ya disponibles para automatizar los procesos.
El plan del PP también incluye un paquete de alivios fiscales, como la exención del IBI y del IVA en compras relacionadas con la reconstrucción, además de medidas específicas para autónomos y empresas, entre ellas, el derecho a solicitar cese de actividad y reducciones en las cuotas según los ingresos. Feijóo subrayó que la recuperación de los afectados no puede depender de la burocracia ni de la inacción gubernamental, y afirmó: «El Gobierno dejó sola a la Generalitat durante la tragedia. Ahora parece que también la va a dejar sola durante la recuperación».