Un instituto de Castellón lanza el bulo del fin de los libros gratuitos si los padres no votan valenciano

Tras ser pospuesta por la dana, finalmente comienza este martes la consulta de la lengua base de la educación en la Comunidad Valenciana. Unas 570.000 familias están llamadas a votar si prefieren que la docencia se imparta en sus aulas principalmente en español o en valenciano. Una medida contenida en la Ley de Libertad Educativa que ha sido criticada con fiereza desde la izquierda y el nacionalismo, que abogan por un modelo de imposición de la lengua regional. Para tratar de influir a las familias, no dudan en emplear la presión, en utilizar los recursos públicos para hacer propaganda o, directamente, en usar mentiras para atemorizar a los progenitores.

Es el caso de lo sucedido en el IES Vicent Sos Baynat de Castellón de la Plana, donde la secretaría del centro ha enviado un mensaje a las familias en el que utiliza un argumento en favor del valenciano que ha sido desmentido desde la Consejería de Educación de la Generalitat Valenciana, ya que no es la primera vez que los nacionalistas lo utilizan para manipular a los padres de los alumnos. En concreto, se refiere al final de los libros gratuitos de la red Xarxa Llibres.

«Desde el centro, queremos informaros de que la opción que más se parece y que permite continuar con el proyecto lingüístico actual es la que se dispone como lengua base (no única) el valenciano, que implica un 52,5 % de presencia del valenciano, un 32,5 de castellano y un 15 % de inglés aproximadamente. La continuidad en el sistema lingüístico vigente (con la opción del valenciano) asegura, entre otras cosas, la continuidad pedagógica y lingüística y mantiene la totalidad de los libros de texto gratuitos mediante el programa de Xarxa Llibres», reza el mensaje, al que ha tenido acceso este diario, dando a entender que la opción del español no garantiza ese programa.

Este tipo de mensajes ha sido ampliamente denunciado por Hablamos Español, asociación que precisa que «el banco de libros seguirá funcionando y los profesores tendrán que adaptar el material didáctico a la lengua mayoritaria. Son funcionarios, están obligados a cumplir la ley», tras recibir varias denuncias de acciones de este tipo por parte de docentes que tratan de imponer el valenciano en el modelo educativo regional con este tipo de argucias. «Les han dejado hacer lo que querían durante tanto tiempo que ahora no los toman en serio», lamenta su presidenta, Gloria Lago, en conversación con este diario y en alusión a las inspecciones y órdenes del Departamento que dirige el consejero José Antonio Rovira, como las de retirar pancartas a favor del valenciano en el interior de los centros.

«Los bancos de libros están asegurados»

Hace un par de semanas, el director general de Centros Docentes de la Consejería de Educación, Jorge Cabo, confirmaba que la continuidad del banco de libros tras la elección de la lengua base en colegios e institutos «está garantizada y no tendrá ningún coste para las familias». «El proceso de la consulta de elección de lengua base está absolutamente estructurado y no supone ningún perjuicio para las familias ni coste alguno. Los bancos de libros están asegurados y si fuera necesario ampliarlos se hará», detallaba.

Cabo abundaba en que tanto en primero como en segundo de Primaria, «la reposición es del 100 % de los libros, por lo que no se plantea ningún problema». «A partir de tercer curso de Primaria no puede haber más de un 20 % de diferencia de tiempo entre las dos lenguas oficiales, por lo que la Conselleria establecerá las tasas de reposición y renovación que se adaptarán a las necesidades de los centros», añadía. Pese a este compromiso del Gobierno de Carlos Mazón, algunos partidarios del modelo educativo en valenciano insisten en influir en el voto de las familias a toda costa.