Colapso en las carreteras gallegas por los cortes provocados por cientos de tractores

Agricultores y ganaderos han sacado sus tractores a las calles por toda la comunidad gallega como protesta por los graves problemas que arrastra el sector. Su objetivo es sensibilizar a la opinión pública.

Diferentes carreteras se han visto afectadas a lo largo de la mañana. En A Gudiña (Orense) se ha cortado los accesos al casco urbano mientras que en Lugo decenas de tractores han rodeado la simbólica Muralla de la ciudad. En la capital gallega, Santiago de Compostela, la Xunta era el epicentro neurálgico de la protesta con tractores llegados de diversos puntos del rural gallego. Y en La Coruña, los manifestantes han provocado importantes corte de tráfico en la ciudad.

Además, localidades como Lalín (Pontevedra), Ribadeo (Lugo), Vimianzo (La Coruña) y Ortigueira (La Coruña) completan la lista de movilizaciones.

Esta es la tercera semana de protestas con una jornada reivindicativa en toda la Galicia a la que se unen los agricultores y ganaderos de la cornisa cantábrica, capitaneados por varias asociaciones: Unións Agrarias (UU.AA.), la Asociación Agraria de Galicia (Asaga) y el Sindicato Labrego Galego (SLG), que amenazan con colapsar la comunidad.

«En defensa del agro común» es el lema compartido por todos y «Ministro, escucha, el campo está en lucha» una de las proclamas de la protesta.

Reivindicaciones del agro gallego

Las reivindicaciones de agricultores y ganaderos pasan por precios justos para los productos del sector primario, rechazo de los tratados de libre comercial, eliminación de la burocratización, así como adaptación de la Política Agraria Común (PAC) «a la realidad de la agricultura y ganadería gallegas», mantenimiento de la reducción en el precio del gasóleo y una «negociación real» con el sector.

Estas movilizaciones son el pistoletazo de salida de la convocatoria realizada por organizaciones agrarias en Galicia, pero no desestiman que hubiesen más en caso de que no haya respuesta por parte de las administraciones.

En declaraciones en Lalín, la secretaria xeral del Sindicato Labrego, Isabel Vilalba, sentencia que «esta es una llamada de auxilio de un sector fundamental», por lo que «si no se mira por él en pocos años seguirán aumentando ese problema de cierre de explotaciones dramático», pues en próximos años se jubilarán «seis de cada diez titulares». Asimismo, recuerda que el próximo 26 habrá una nueva movilización en Madrid, ante el Ministerio de Agricultura.

Por su parte, en Santiago, el presidente de Asaga, Francisco Bello, ha señalado que se busca «demostrar que hay un medio rural vivo» que se movilizan por toda España para «defender la dignidad de vivir en el rural y de producir alimentos». Avisa de que el futuro de la alimentación en Europa está «en grave riesgo».

Entre los productores que han participado en las protestas, Anxo Dono, ganadero de Mesía (La Coruña) responsabiliza a las grandes empresas de la situación por tener «el monopolio» y ser los que fijan los precios. «Nunca sé a cuánto voy a cobrar mi producto, si es que lo voy a vender», ha expuesto sobre la situación que vive el sector. Por otra parte, Dono ha demandado tener en cuenta las peculiaridades de Galicia en las normativas europeas.

Estas protestas llegan después de las elecciones gallegas del pasado domingo, 18 de febrero, ya que las organizaciones agrarias explicaron que posponían las movilizaciones hasta que pasasen los comicios.

Sin embargo, grupos de ganaderos de la provincia de Orense y los lucenses de Agromuralla se desmarcaron de esta postura y protagonizaron protestas aisladas en las últimas semanas en sitios como La Coruña, Lugo y la ciudad de Las Burgas.