La huella de Antonio Palacios en Galicia: estos son sus proyectos emblemáticos
Este arquitecto está considerado como uno de los más influyentes en España en la primera mitad del siglo XX
Antonio Palacios (1874-1945) está considerado como uno de los arquitectos más influyentes en la España de la primera mitad del siglo XX. Nació en la localidad de O Porriño, en la provincia de Pontevedra y pronto se trasladó a Madrid, donde se encargó de diseñar edificios emblemáticos que hoy forman parte de la identidad de la capital de España. En su Galicia natal también dejó su particular sello arquitectónico.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, destacaba recientemente en un artículo publicado en la prensa gallega que Palacios es, sin duda, un ejemplo paradigmático de «madrigallego». «Natural de O Porriño, Antonio Palacios se trasladó a Madrid para cursar estudios de Arquitectura. Allí desarrollo su carrera y alcanzó el éxito casi inmediatamente después de iniciar el ejercicio profesional», indicó.
Su obra se caracteriza por combinar elementos del Gótico, el Neoplateresco o el Barroco, aunque también siguió corrientes contemporáneas como el Modernismo, lo que le permitió alcanzar el equilibrio entre las concepciones tradicionales y los métodos contemporáneos.
Proyectos gallegos
En Galicia realizó algunos proyectos. El departamento de Turismo del Gobierno autonómico señala que existen «ejemplos de su arquitectura en diferentes lugares», como algunas de «las construcciones del Balneario de Mondariz, en Pontevedra, donde es imposible pasar por alto la Fuente de Gándara». Señala que se trata de «una especie de templo de estilo clasicista cubierto por una espectacular cúpula que protege la fuente de su interior».
En Vigo se conserva otro de sus proyectos: el Teatro García Barbón, con un estilo inspirado en la Ópera Garnier de París. Destaca sobre todo la escalera de acceso al teatro, iluminada por una vidriera realizada por la casa Maumejean.
En Baiona se encuentra el Monumento Virxe da Rocha. Esta es una construcción de 15 metros de altura que representa a la Virgen sosteniendo en su mano una especie de barca-mirador a la que se accede mediante una escalera realizada en piedra.
Otro emblema de Palacios en Galicia es la Casa Consistorial de O Porriño. En esta obra se planteó construir un edificio emblemático en un pequeño solar.
Turismo de Galicia asegura que es «innegable que la huella de Antonio Palacios Ramilo perdura en el tiempo y que su legado arquitectónico tiene un papel protagonista en muchas ciudades y pueblos de Galicia».