Los petroleros que asolaron Galicia: cinco catástrofes en 32 años
El 'Polycommander', 'Urquiola', 'Andros Patria', 'Aegean Sea' ('Mar Egeo') y 'Prestige' causaron mareas negras que arrasaron la costa
Dos de los accidentes se registraron en La Coruña, en enclaves muy próximos
La avería del buque Nissos Rhenia, con una carga de 150.000 toneladas de gasóleo, hace unos días, cuando navegaba a la altura de Viana do Castelo, en Portugal, en una zona muy próxima a la frontera con España, vuelve a recordar los peligros del tránsito de petroleros. Galicia lo sabe bien porque es un territorio muy castigado por los siniestros de este tipo de buques. En la segunda mitad del siglo XX vivió cinco grandes catástrofes que asolaron la costa con importantes mareas negras.
El accidente más recordado es el Prestige en 2002, tanto por los daños que causó con la llegada del crudo a la costa como por la inédita contestación social que se produjo durante las semanas posteriores al siniestro, en la que se hizo famosa la palabra «chapapote», que la Real Academia de la Lengua (RAE) define como «sustancia viscosa de cualquier tipo extendida por el suelo».
Antes del Prestige, otros petroleros causaron importantes catástrofes entre 1970 y 2002. Son el caso del Polycommander, Urquiola, Andros Patria y Aegean Sea (este último conocido por la traducción de su nombre al español, Mar Egeo).
'Polycommander', 1970
El primero de esta lista de los desastres más recordados en aguas gallegas es el Polycommander, un barco noruego que en 1970 embarrancó en la entrada de la Ría de Vigo y el petróleo que vertió afectó a las Islas Cíes.
Viajaba entre Líbano y Francia y durante la madrugada del 5 de mayo se acercó demasiado a la isla de Monteagudo, en las Cíes, y encalló sobre los arrecifes. Se estima que vertió al mar unas 15.000 toneladas de crudo.
Los 39 tripulantes, entre ellos cinco mujeres y dos niños, fueron rescatados con vida.
'Urquiola', 1976
Urquiola es un nombre que muchos todavía recuerdan perfectamente en La Coruña. El 12 de mayo de 1976, en la ruta de entrada al puerto un navío con ese nombre, de bandera española, sufrió un accidente. Portaba desde el Golfo Pérsico una carga de crudo para la empresa Petrolíber, que tenía previsto emplearlo en la refinería situada en las afueras de la ciudad.
La embarcación quedó embarrancada al encallar contra una aguja rocosa que estaba mal señalizada, tal y como reconoció una sentencia del Tribunal Supremo que llegó años después y que condenó al Servicio Cartográfico de la Marina. Previamente se intentó culpabilizar al capitán, Francisco Eduardo Rodríguez Castelo, el único fallecido en la tragedia que murió tras las explosiones. Los tribunales lo exculparon, dando la razón a su familia.
Vertió unas 100.000 toneladas de petróleo al agua y las rías de Betanzos, Ferrol y Ares fueron las más afectadas.
'Andros Patria', 1978
El Andros Patria fue un buque griego que se accidentó cuando navegaba a la altura de las Islas Sisargas el 31 de diciembre de 1978. Viajaba entre Irán y Rotterdam. Murieron 34 de sus 37 tripulantes. Solo sobrevivieron los que se quedaron en el navío, ya que fueron rescatados por un helicóptero. El resto falleció en el mar.
Vertió cerca de 50.000 toneladas de petróleo, creando una marea negra que afectó a todo el litoral norte de Galicia, entre las localidades de Caión y Ribadeo.
'Aegean Sea' ('Mar Egeo'), 1992
La Coruña volvió a ser protagonista de un accidente de un petrolero en 1992, después de que en 1976 ya hubiese sufrido el del Urquiola. En este caso, un buque de bandera griega, el Aegean Sea, más conocido por la traducción de su nombre al español, Mar Egeo, embarrancó en los acantilados al pie de la Torre de Hércules. La peculiaridad que presenta este suceso es que ocurrió pegado a la costa y muy próximo a la propia urbe, habitada por cerca de 250.000 personas.
La catástrofe ocurrió en la madrugada del 3 de diciembre de 1992, un día que muchos coruñeses no olvidan por la espectacular humareda visible desde toda la ciudad y su comarca. Esta embarcación transportaba 90.000 toneladas de crudo con destino a la refinería de Repsol (antes Petrolíber) y vertió al agua cerca de 50.000 (el resto se quemaron). La marea negra afectó principalmente a las Rías Altas.
La Audiencia Provincial de La Coruña declaró responsables del accidente al capitán y al práctico del Puerto coruñés, por permitir la entrada del barco una noche con mal tiempo, lo que estaba prohibido por las normas vigentes. La condena del servicio de practicaje aquella noche supuso que el Estado español fuese declarado responsable civil subsidiario al tratarse de un servicio de su competencia.
'Prestige', 2002
El Prestige es el más recordado de esta lista. Este petrolero, operado bajo bandera de las Bahamas, realizó una llamada de socorro el 13 de noviembre de 2002 frente a las costas de Galicia en pleno temporal. El día 19 se partió en dos.
Transportaba 77.000 toneladas de crudo, de las que cerca de 60.000 acabaron vertidas al mar. La marea negra afectó a especialmente a toda la costa gallega. También alcanzó múltiples puntos del resto del litoral español, Portugal y Francia. El petróleo llegó a más sitios debido a la maniobra de alejamiento del buque por parte del Gobierno central.
A diferencia de en otros siniestros, el impacto de este suceso en la sociedad gallega, española e internacional generó una movilización inédita hasta aquel momento debido a la gestión del desastre. Miles de voluntarios se desplazaron a Galicia para intentar retirar la mayor parte del crudo llegado a la costa.
El Tribunal Supremo consideró culpable al capitán del barco de un delito imprudente contra el medio ambiente.