
Gente paseando por la zona de la Torre de Hércules en La Coruña
El dicho popular que refleja la idiosincrasia de cuatro ciudades de Galicia
Nacido de la tradición oral, utiliza estereotipos asociados a estos lugares y lo hace con la retranca gallega
El refranero gallego es un tesoro de sabiduría popular que refleja las costumbres, la historia y la forma de ser de los gallegos. A través de frases breves, muchas veces poéticas y con un tono humorístico, los refranes condensan la esencia de la vida cotidiana en esta región.
Entre ellos, existe uno que pone de manifiesto la diversidad de caracteres de sus cuatro ciudades principales ya que encapsula la esencia de cada una de ellas. Más allá de la rima pegadiza, este dicho popular revela las peculiaridades y los estilos de Vigo, Pontevedra, Santiago de Compostela y La Coruña, que han moldeado su identidad. Un refrán desconocido en el resto de España y que servirá para entender el carácter de los gallegos.
La esencia de cada una de las ciudades
El dicho popular en cuestión nació de la tradición oral y utiliza los estereotipos asociados a cada ciudad para representar su idiosincrasia de manera irónica. Se trata del refrán 'Mientras Vigo trabaja, Pontevedra duerme y Santiago reza, La Coruña se divierte'. Más allá de la literalidad de la frase, lo cierto es que este dicho resume con agudeza los diferentes estilos de vida que coexisten en Galicia.
Vigo es la urbe más poblada de Galicia y un motor económico clave, gracias a su puerto pesquero, su industria naval y su tejido empresarial en constante crecimiento. La cultura del esfuerzo y el espíritu emprendedor han forjado su identidad, lo que justifica su fama de ciudad trabajadora. El refrán subraya esta imagen, destacando la intensidad laboral que caracteriza a sus habitantes.Pontevedra, por otro lado, es reconocida por su casco histórico peatonalizado y su calidad de vida. La tranquilidad y el ritmo relajado con que se vive en sus calles han hecho que el refrán la etiquete como una ciudad que «duerme». Aunque esta afirmación se presenta con un matiz humorístico, lo cierto es que Pontevedra es un lugar que invita al descanso y al disfrute de la vida sin prisas.
Como capital de Galicia y destino final del Camino de Santiago, la ciudad de Compostela es sinónimo de espiritualidad y tradición religiosa. Y su catedral es el símbolo de su fe. Por ello, el refrán la vincula con la oración, en referencia a su papel histórico y cultural como centro de devoción cristiana.
Finalmente, La Coruña es retratada como la ciudad que mejor sabe disfrutar de la vida. Con una amplia oferta de ocio, restaurantes, terrazas y eventos culturales durante todo el año, se ha ganado la reputación de ser el lugar donde la diversión nunca falta.
Este refrán no solo resalta las diferencias entre estas ciudades, sino que también es un ejemplo del ingenioso humor gallego. Lejos de ser una afirmación categórica, es una manera de subrayar con ironía los rasgos característicos de cada localidad.
Galicia es una tierra donde cada ciudad tiene su propio ritmo y esencia pero que, sin embargo, comparten la morriña y la hospitalidad tan propias del carácter gallego.