Investigado un orensano por el estado «famélico» de sus cabras y ovejas que convivían con cadáveres de animales

La Guardia Civil ha desarrollado una operación denominada «Marcou» en la que acudió a verificar el estado del ganado de un orensano. Ahora, el investigado tendrá que declarar por, supuestamente, maltratar y tener abandonadas a 19 cabreas y ovejas en una finca.

Durante estas pesquisas, los profesionales constataron que los 19 animales que había en la parcela, de las especies ovina y caprina, estaban «famélicos y en situación de desnutrición por falta de alimento propio, ya que solamente se alimentaban por los pocos hierbajos que generaba la propia finca», relata la Guardia Civil. Además, el agua se la facilitaba el dueño de la finca y no el propietario de los animales.

Junto a esto, en la superficie del terreno se encontraban los cadáveres de dos ovejas y un cabrito que estaban en estado de descomposición. También había restos de lana amontonada en varios puntos diferentes de la parcela, lo que indicaba la posible muerte de otros ejemplares.

Asimismo, el cobertizo que disponían los animales para resguardarse de las inclemencias meteorológicas tenía «un tamaño reducido que carecía de las condiciones mínimas higiénico sanitarias, iluminación y ventilación adecuada», añade el Instituto Armado.