Vecinos de Vigo se ven obligados a abandonar sus pisos ante una plaga de ratas
Los primeros indicios de la aparición de los roedores a principios de este año
Los vecinos del Casco Vello Alto de Vigo se han visto obligados a abandonar sus pisos ante una plaga de ratas. Los roedores han tomado el barrio y son vistos frecuentemente tanto en la calle como en las casas, lo que está provocando una creciente preocupación entre los residentes de la zona.
Las principales zonas afectadas son las colindantes a Porta do Sol, concretamente la rúa Cruz Verde, Abeleira Menéndez y la Segunda República; así lo recoge La Voz de Galicia.
Los residentes comentan que desde hace días se encuentran excrementos de los animales en los balcones pero, alguno de ellos, ya vivieron unos primeros indicios de la aparición de los roedores a principios de este año, cuando empezaron a aparecer marcas de mordiscos en las hojas de las plantas de un segundo piso. En un principio achacaron el suceso a las gaviotas.
Aunque en algunos de los edificios la presencia de ratas ha remitido notablemente, en otros sigue todavía muy presente. Los vecinos piden que se le dé solución a una situación que se lleva soportando durante demasiado tiempo.
Principalmente, los roedores se mueven por la noche, lo que supone una de las mayores molestias para los residentes es que los animales les impiden descansar.
Posibles hipótesis de la plaga
La hipótesis de algunos afectados es que los animales provienen de una casa tapiada en la calle Segunda República. El inmueble está en muy mal estado, lleno de escombros, y no está desratizado, por lo que serviría como zona de cría ideal para los animales.
También apuntan a que los eventos masivos que hay constantemente por la zona y la comida tirada por los suelos son factores que contribuyen a que las ratas se acomoden en esta parte del centro de Vigo.
Personal del Ayuntamiento de la ciudad olívica ha colocado algunos cebos para controlar la población de ratas, aunque todavía no han dado con una solución definitiva para acabar con el problema. Las trampas parecen mitigar un poco la situación, pero no logran que desaparezca por completo el problema.