San Sebastián, Castellón, La Coruña y Córdoba: las claves de un reencuentro

Hay partidos que no son uno más para algunos futbolistas y uno de esos será el que enfrentará al Córdoba CF frente al Castellón. Y lo será para el central, ahora blanquiverde, Adrián Lapeña, quien se medirá a uno de sus antiguos equipos y, probablemente, el más especial, si se tiene en cuenta que en Castalia se produjo su eclosión.

Lapeña se formó en las categorías inferiores de la Real Sociedad y, tras llegar al B (donde permaneció tres temporadas) dio el salto al KAS Eupen de la Primera División belga. Después de la aventura europea recaló en el Castellón, con el que logró el ascenso a Segunda División en 2020 y con el que defendió su camiseta en la categoría de plata en 33 encuentros.

Tras el descenso del equipo orellut, Lapeña fue fichado por el Deportivo de la Coruña, donde completó dos temporadas, rindiendo a un gran nivel, sobre todo, en la primera de ellas. Y, de Riazor, hizo las maletas este verano para recalar en el Arcángel, donde ahora se medirá a uno de sus antiguos equipos.

Sobre esa experiencia en Castellón, el central ha reconocido que «tengo buenos recuerdos», aunque ha concedido que «es verdad que la última temporada, con el descenso, se te queda un poco de sabor agridulce». Pero ha repuesto que «allí hice un buen papel, guardo muchos amigos».

El zaguero ha desvelado que «siempre quiero que les vaya bien, excepto cuando juegan contra mí, como ocurrió el año pasado», cuando el Castellón eliminó en el play-off al Deportivo de la Coruña. Y ha subrayado que «sí es especial enfrentarme a ellos, porque cundo has pasado un tiempo allí y has tenido alegrías con muchos de los que siguen, es bonito reencontrarnos y disfrutar del fútbol entre nosotros, que es para lo que jugamos».