El Córdoba Patrimonio se deja la Copa de Andalucía en los penaltis (3-3)

El Córdoba Patrimonio de la Humanidad no pudo revalidar el título de campeón de Andalucía tras caer en la tanda de penaltis en la final disputada ante el Jaén Paraíso Interior FS en Málaga. Tras un choque que concluyó con empate a tres dianas, los de Santoro vieron como la diosa fortuna, que se alió en semifinales ante el Betis, les era esquiva en la matinal del domingo. Aun así, buenas sensaciones desprendidas por los ribereños, que todavía no saben lo que es perder en esta atipica pretemporada.

La cita en tierras malagueñas arrancó con la igualdad como protagonista, si bien un disparo de Dani Zurdo provocó la intervención de un inspirado Fabio. Más clara fue la opción de gol de Macedo en el cuatro de juego. El portugués, tras un gran regate, se topó con Dudu. Una lástima ya que en la siguiente acción Cristian Rubio adelantó a los del Santo Reino. Del posible 0-1, al 1-0.

El tanto en contra no descompuso a los de Santoro, que pudieron igualar la contienda gracias a sendos disparo de Pablo Cendán y Murilo Duarte. Más fortuna tuvo Echavarría poco después. El Churro, tras una rápida transición, puso el 1-1 en el electrónico merced a un potente chut de zurda. Se hacía justicia, visto lo visto, en Ciudad Jardín. De ahí al final de periodo se pudo ver a un Córdoba Patrimonio sólido, concentrado, de menos a más. Ambos equipos tuvieron sus opciones de adelantarse, pero los guardametas cumplieron a la perfección. Al descanso, tablas en el electrónico.

Tras el paso por vestuarios, intercambio de golpes. Cristian Rubio, nuevamente, adelantó a los suyos en el 24’, si bien un minuto después fue Enzo Báez, jugador del filial, el que puso un más que emocionante 2-2 en el marcador. Mucha tela aún por cortar en Málaga, máxime cuando se medían los dos únicos conjuntos andaluces de la máxima categoría.

Rebasado el ecuador de segundo periodo, y cuando más enchufado en el duelo estaban los de Santoro, Luque desniveló la contienda tras una gran volea en una acción iniciada desde la esquina. La estrategia le funcionaba a los de Dani Rodríguez. Pero no estaba todo dicho. El poder de reacción de los cordobesistas, bárbaro. Pablo del Moral, apenas segundos después del tercer tanto jienense, puso el 3-3 tras empujar el cuero sobre la misma línea de meta tras un disparo del portero Víctor.

Con dicho marcador se llegó a la finalización de los 40 minutos reglamentarios, por lo que los penaltis decidirían el ganador de la final. Desde el punto fatídico, los del Santo Reino tuvieron más tino de los blanquiverdes, que erraron dos lanzamientos a pies de Murilo y Lluc.