Entrevista | Portavoz de Vox en la Comunidad de Madrid
Rocío Monasterio: «Si Ayuso tiene voluntad de sacar los Presupuestos, los sacamos en febrero»
La líder de Vox en Madrid advierte, en línea con Abascal, que el «golpe institucional» del Gobierno de Pedro Sánchez «se ha frenado parcialmente con la resolución del TC, pero sigue estando vigente»
Tarde lluviosa en Madrid, y día agitado en la panorama político nacional. En una semana ajetreada antes de Navidad, Rocío Monasterio, líder de Vox en la Comunidad de Madrid, visita la redacción de El Debate para explicar, entre otras cosas, su 'no' al dictamen de los Presupuestos de la región para el nuevo año, qué pide su partido y en qué punto se encuentran las relaciones con el PP a poco más de cinco meses para terminar la legislatura.
–¿Cuándo fue la última vez que hablaron con el PP?
–Pues la verdad es que desde el 30 de noviembre por la tarde no tenemos más noticias. Ni nos han llamado, ni nos han escrito, ni ha habido ningún intento de conectar con nosotros. Dieciséis días en que no ha habido el más mínimo intento de comunicar, ni de negociar unos presupuestos, ni de ofrecer nada.
–Ustedes dicen que grabaron sus enmiendas en tiempo y forma, pero que se registraron con retraso por un error técnico. Sin embargo, el informe de la Asamblea concluyó que no había existido ese error…
–Las enmiendas son el día 2, y no es necesario para llegar a un acuerdo para los Presupuestos. Aun así, en la Asamblea de Madrid hay continuos fallos de conexión, ese día hubo uno. Nuestras enmiendas estaban grabadas a las 11:45 y el sello que se emite aparece con hora 12:06. Esto es como si llegas a un mostrador de registro, entregas puntualmente tus papeles y tardan en venir a ponerte el sello. Cuando a la secretaria general de la Asamblea, el viernes, se le comenta lo que ha pasado, y viendo nuestras llamadas a los técnicos, dice «no pasa nada, el lunes esto se resuelve, porque parece que claramente había una voluntad de registrar y realmente parece que ha habido un fallo».
Cuál es nuestra sorpresa cuando, habiendo adjuntado y presentado en la Mesa el escrito, explicando todo con la confianza de que eso se iba a resolver, como se ha resuelto en otros casos con Ciudadanos o con un grupo de izquierda, vemos que el PP y Más Madrid votan en contra de que sea considerado el escrito de Vox. Esto nos dejó atónitos, porque realmente nuestra voluntad era registrar nuestras enmiendas y llegar a un acuerdo.
Aun así, dijimos «ofrezcan un acuerdo político y votamos a favor de unos Presupuestos». Tampoco ha habido ningún intento. Entonces, la conclusión a la que llegamos es que no hay voluntad política de llegar a un acuerdo. Hemos pedido que se habilite enero para ir tramitándolos. Si el PP tiene voluntad de sacar los Presupuestos, pongámonos a trabajar en enero y los sacamos en febrero. Es así de sencillo.
Lo que no podemos permitir es que se nos exija un contrato de adhesión a cambio de nada
–¿Cree que los votantes de Vox han entendido su postura?
–Yo creo que sí. Lo que quieren es que se les respete, que no se les humille y que se tengan en cuenta sus propuestas. Hemos sido muy generosos con la señora Ayuso. Hemos dado la presidencia a cambio de nada, hemos votado a favor de 20 leyes, el jueves pasado, las dos últimas, la Ómnibus y la Ley de Farmacia, y todo con la voluntad de que Madrid salga adelante. Pero somos un partido que tenemos ideas que queremos aportar y que son buenas para los madrileños. Y lo que no podemos permitir es que se nos exija un contrato de adhesión a cambio de nada, porque no somos el mismo partido, y necesitamos que se nos respete. Y esto, por desgracia, no ha sido así.
–¿Y los votantes del PP? Porque al final parte del electorado del Partido Popular también está de acuerdo con muchas de las ideas de Vox...
–Claro, los votantes del PP e incluso votantes de izquierda que me escriben, algunas de las cosas que pedimos, como es la derogación de la ley trans, entienden perfectamente que es algo necesario porque es necesario proteger a nuestros niños y que no se pueden aplicar leyes que al final alejan a los padres y les quitan la capacidad siquiera de opinar sobre que se hormone a su hijo. Y esta es la Ley Trans de Ayuso, que está vigente en la Comunidad de Madrid. Esta ley se basa en la autodeterminación de género, no tiene presunción de inocencia, tiene inversión de carga de la prueba, permite participar en categorías de mujeres a trans, permite que un juez hormone a un niño con 12 años sin permiso a los padres, y permite sancionar a cualquiera que cuestione la ley trans. Es una barbaridad. Me sorprende que la señora Ayuso siga empeñada en defender su ley trans cuando es más agresiva que la de Irene Montero, que se va a debatir el jueves.
–¿Cómo cree que van a ser las relaciones entre el PP y Vox en los últimos meses de esta legislatura?
–Si es por nuestra parte, buenas. No tenemos ninguna intención de equivocarnos de enemigos. El enemigo hoy es Sánchez, y los golpistas y los bilduetarras. Hoy y antes también. Lo que creemos es que el PP se está confundiendo de enemigo y ha intentado darnos una bofetada, humillar a nuestros votantes en la Comunidad de Madrid. A lo mejor es porque les ha sentado mal que anunciáramos que vamos a presentar una moción de censura. Nos gustaría saber dónde está hoy el PP.
–¿Cree que este cambio en su relación forma parte de una estrategia de Génova?
–A mí lo que me resulta inexplicable es estar en una relación cordial hasta el 30 noviembre y del 30 noviembre al 16 que se vota que nadie llame, nadie contacte, nadie tenga intención de acordar nada. Yo he dado miles de mensajes en medios diciendo «cojan una de nuestras propuestas; lleguemos a un acuerdo político», y lo único que he recibido es bofetadas. La señora Ayuso ha dicho: «No vamos a derogar la ley trans, es un tema de derechos fundamentales». No sé a qué se refiere. Yo me refería a los derechos de los niños. «No vamos a bajar impuestos, porque ahora no podemos». Entonces, ¿por qué gasta en otras cosas innecesarias? Todo lo que he recibido es un no, no y no por todos sitios.
–¿Cree que le resultaría más fácil negociar con Isabel Díaz Ayuso o con Alberto Núñez Feijóo?
–Pues para eso tendría que conocer al señor Feijóo, que no tengo el gusto de conocerle.
–Quedan cinco meses para las elecciones autonómicas. No sé si nos puede adelantar si repite como candidata para la Comunidad de Madrid...
–Yo no hago como la señora Ayuso. No me adelanto a lo que va a decir el señor Abascal. Cuando considere, dirá quiénes son los candidatos.
–¿Cuáles cree que deberían ser los puntos principales en los que centrar la campaña?
–Yo creo que las enmiendas y las propuestas que llevamos en el presupuesto para la Comunidad de Madrid dan una orientación de por dónde vamos. Creemos en la defensa de la propiedad privada, por la tanto, en la lucha contra la okupación; creemos que la seguridad en nuestras calles ha empeorado; creemos que se ha precarizado a las clases profesionales y tenemos que cuidar a los profesionales más valiosos, médicos y profesores; creemos que una política fiscal de impuestos bajos favorece la creación de riqueza y la prosperidad; creemos que Madrid tiene un grave problema de vivienda y por eso tenemos que liberalizar suelo y facilitar el acceso a los jóvenes eliminando los impuestos; y creemos que la familia es el pilar fundamental de la sociedad, por eso tenemos que hacer ayudas a la natalidad y la protección de la familia.
–Ha mencionado al personal sanitario. ¿Cómo ve la situación y la gestión por parte del Gobierno regional?
–Creo que es un problema que tenemos que resolver rápido porque afecta gravemente a los madrileños. Lo que proponemos, estudiando lo que hemos podido de los datos que teníamos, es subir los sueldos a los médicos 200 euros, que era lo que habían perdido por el topado de las horas. Creo que es razonable y no supone un importe que no pueda afrontar el Gobierno de la Comunidad de Madrid. Hace falta también un refuerzo en pediatría y, en Atención Primaria sacar la parte de la receta hospitalaria. Esas tres medidas creo que son fundamentales. Tenemos que hacer todo lo posible por premiar a los médicos, por valorar su trabajo, si no, se irán a otros sitios.
–En clave nacional, ¿qué valoración hace de lo que ha ocurrido con el Tribunal Constitucional?
–A lo que estamos asistiendo es a un golpe institucional que se venía fraguando desde hace tiempo, y lo que vemos es un presidente del Gobierno que para contentar a sus socios golpistas y bilduetarras es capaz de reformar la Constitución por la puerta de atrás. El golpe se ha frenado parcialmente con la resolución del TC, pero sigue estando vigente. Y lo que tenemos claro es que Sánchez hará todo lo posible por controlar a los jueces, y todo lo posible para contentar y liberar a los golpistas, y para que sean redimidos y perdonados los delitos de malversación y sedición. Y lo malo es que si avanza la reforma de estas leyes, eso luego tiene muy difícil vuelta atrás.
Lo que es urgente es sacar a Sánchez del Gobierno, porque está conspirando para la sedición, y por eso nos vamos a querellar este viernes contra él. La mejor manera de sacarlo es con los votos, con una moción de censura en el Congreso, con un candidato de consenso y con el voto de muchos otros, de otros partidos que creen que la Constitución está por encima de todas las leyes, que es lo que nos garantiza el Estado de Derecho y lo que permite en España la democracia y la libertad.
–Pedro Sánchez dijo ayer en su declaración institucional que acata la decisión del TC, pero que el Gobierno va a tomar las medidas necesarias para que se respete la Constitución y la voluntad de los españoles en las urnas. ¿Cómo interpreta estas declaraciones?
–El primero que no respetó las decisiones de los españoles en las urnas fue Pedro Sánchez, porque él fue votado diciendo que nunca pactaría con Podemos...etc. Y la realidad es que todos sus socios son precisamente la izquierda radical, los golpistas y los bilduetarras. El primer engaño es el de Pedro Sánchez cuando accede al poder de una forma fraudulenta, engañando a todos los votantes.
No sé en qué está pensando el presidente del Gobierno, pero es gravísimo que, además, se haya atrevido a apelar y a dejar caer los «magistrados conservadores» con ese adjetivo. Los jueces no son ni tienen que ser de una parte o de otra; están para garantizar el cumplimiento de la Ley de Leyes, la Constitución. Y si acabamos con eso y dudamos del Constitucional, se deshace toda esa estructura institucional que tenemos. No vamos a permanecer parados y esperamos que otros partidos también se activen y hagan propuestas para frenar el golpe.