La crónica de Madrid
Ayuso y sus políticas contra la ideología 'woke' para reforzar la familia y despolitizar las aulas
La presidenta de la Comunidad de Madrid ha pisado el acelerador para reforzar su perfil de lucha contra la politización que la izquierda ha extendido
La ideología woke lo inunda todo. Desde el cine, hasta el contenido impartido en las aulas. Lo convencional ya no es lo corriente y estar ofendido es un estado de sentir constante. A pesar de la dificultad de ir a contracorriente (en ocasiones, incluso, a su propio partido) la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha desarrollado una serie de políticas dirigidas a suprimir, o al menos rebajar, este tipo de políticas desde su Gobierno.
En las últimas semanas, el Ejecutivo madrileño ha puesto en marcha tres ideas con este objetivo. La primera es el anuncio de una nueva ley de Familias que proteja esta institución y reconozca la labor de los abuelos dentro de la misma. Esta ley, que se pondrá en marcha desde la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos sociales dirigida por Ana Dávila. Fuentes de la Comunidad defienden la necesidad de que sea cada familia la que tome las decisiones correspondientes a su unidad y que no sea la Administración o los órganos ejecutivos los que tengan la última palabra en asuntos como ciertos aspectos de la educación. Por el momento esta ley se encuentra en creación, pero la mayoría absoluta de la que dispone el Ejecutivo de Ayuso aligerará los trámites.
Con esta ley, la presidenta pretende que el núcleo familiar se refuerce y no quede en detrimento frente a la individualización de una sociedad que premia en ocasiones la desvinculación de la familia como un acto de empoderamiento.
La educación de los niños también está fuertemente condicionada por la ideología. Las materias escolares están cada vez más vinculadas a la ideología llegando a encontrarse ejemplos en los que los propios libros de texto manipulan la Historia para ofrecer una versión parcial de los hechos.
La presidenta de la región, Isabel Díaz Ayuso, anunció que, este mismo curso, se implantarán ciertas medidas encaminadas a maximizar el potencial de los alumnos madrileños garantizando «impartir contenidos curriculares con rigor». Además, Madrid revisará de manera minuciosa los libros de texto de las distintas etapas que han estrenado nuevos currículos para el curso escolar 2023/24 por la entrada en vigor de la ley de educación estatal LOMLOE. En concreto, este año se inspeccionarán los de 6º de Primaria, 2º y 4º de ESO y 2º de Bachillerato.
El objetivo, según defendió la Consejería de Educación de Emilio Viciana es «garantizar a las familias que los contenidos de estos manuales para los alumnos madrileños respetan y se ajustan a los principios constitucionales».
De la misma manera, la Consejería de Salud dirigida por Fátima Matute en colaboración con la de Educación organizará charlas de salud «sin ideología» para alumnos de educación Primaria, Secundaria y Formación Profesional. La intención es que la «ingeniería social» quede fuera de estos contenidos que repasarán los hábitos saludables, higiene, adicciones, salud mental, drogas y hábitos alimentarios y nutrición.
El Gobierno regional persigue el objetivo de despolitizar y desideologizar la administración con el fin de que se extienda a la sociedad madrileña a través de sus medidas, algo que ha convertido a Ayuso en el objetivo claro de la izquierda española.