El Pleno de Cibeles comienza sin minuto de silencio por Marisa Paredes ante la negativa de Vox
«Su desprecio hacia millones de españoles que no comparten su visión política no la convierten en una figura adecuada para ser reconocida por los madrileños», señalan desde la formación de Santiago Abascal
El Pleno extraordinario de Cibeles que se celebra este lunes para aprobar los Presupuesto Municipales ha arrancado sin minuto de silencio en memoria de la actriz madrileña Marisa Paredes ante la falta de acuerdo de los grupos políticos en Junta de Portavoces.
El 'no' explícito ha venido desde Vox, que ha rechazado el reconocimiento a Paredes mediante un minuto de silencio por considerar que su trayectoria pública «ha estado marcada por un posicionamiento ideológico sectario, alejado de los valores de unidad y respeto que deben primar en las instituciones».
«Su desprecio hacia millones de españoles que no comparten su visión política no la convierten en una figura adecuada para ser reconocida por los madrileños», han trasladado los de Javier Ortega Smith.
Más Madrid y PSOE votaron a favor del minuto. Desde el primer grupo político se ha pronunciado su portavoz, Rita Maestre, que ha lamentado en sus redes sociales que la sesión haya arrancado sin el recuerdo a esta «madrileña ilustre y vecina comprometida con Madrid».
«Vox se ha negado a nuestra propuesta (en Junta de Portavoces) y el PP ha callado. La derecha madrileña contra la cultura y la libertad una vez más», ha criticado la líder de Más Madrid en el Ayuntamiento.
El debate sobre Marisa Paredes llegará a este mismo foro ya en enero, cuando Más Madrid presente una proposición para que la actriz madrileña tenga un recuerdo y homenaje en su ciudad natal «a su altura». Rita Maestre explicaba días atrás que toman esta decisión en busca del mayor consenso político posible.
La formación política está en contacto con el entorno de la actriz y después consensuar un homenaje de la ciudad «con el máximo número posible de grupos municipales».
«Marisa Paredes es historia fundamental del cine y de la cultura española y, por lo tanto, se merece no sólo una placa en su calle, en su plaza, en su querida Santa Ana, sino también su nombre en alguno de los centros culturales de la ciudad de Madrid», destacaba Maestre.