Vox rompe los pronósticos: mantiene su escaño y suma casi 4.000 votos más

«Misión cumplida», gritó una mujer desde el hotel de Vitoria donde Vox seguía este domingo la noche electoral antes de la comparecencia de Santiago Abascal y la candidata, Amaia Martínez. A lo que el líder de Vox señaló que se logró «una parte muy pequeña» de esa misión, porque pese a que el partido mantiene su escaño y crece en votos, los resultados del País Vasco, con la victoria del PNV y EH Bildu, «son malos para España».

«ETA y el partido separatista vasco han ganado las elecciones y los españoles las vamos perdiendo desde hace mucho tiempo. Los españoles leales a nuestra patria, a la unidad, que defendemos las libertades, estamos retrocediendo posiciones desde hace demasiado tiempo por la complicidad de una gran parte de la clase política nacional», lamentó Abascal, con críticas al PSOE pero también al PP. Y afirmó que hoy se asiste a «los últimos compases de un proceso de traición, de autodestrucción y de disgregación».

La formación de Abascal rompió todos los pronósticos. Las últimas encuestas vaticinaban que posiblemente perdería el escaño, por Álava, con el que irrumpió en la Cámara vasca hace cuatro años. Pero finalmente no solo lo mantiene, sino que crece en votos. Concretamente pasa de 17.569 que obtuvo en 2020 a más de 21.000 votos.

«Vox ha vuelto a poner una pica en un Parlamento difícil, y en una tierra complicada en la que nos digan lo que nos digan (...) es una tierra en la que todavía no hay libertad, en la que todavía hay miedo», señaló Abascal, que se acordó especialmente de los votantes de los pequeños municipios, donde confían en el partido 2, 12 o 70 personas.

«No os vamos a dejar solos»

A todos los votantes les aseguró que estarán representados por Amaia Martínez en el Parlamento vasco y en el Congreso por los 33 diputados, «que nunca se van a olvidar de ellos», y les definió como «la semilla de la reconstrucción y de la reconquista» en la región.

También Martínez se refirió a ellos como «valientes» y celebró haber mantenido el escaño y crecer en votos pese al intento de silenciamiento y hostigamiento estos cuatro años, como denunció, y una campaña «realmente dura». De hecho, Vox ya ha llevado ante los tribunales las agresiones y ataques a simpatizantes y afiliados en tres municipios vascos en actos electorales.

«No os vamos a dejar solos. Vamos a estar a vuestro lado. (...) Vamos a seguir llevando la verdad al Parlamento vasco. Vamos a estar junto a vosotros frente al peor Gobierno posible», prometió la voz del partido en la comunidad autónoma.