Fundado en 1910
puerto-lagasca

Es el restaurante idóneo de comidas de negocio y de almuerzos semanales en buenas compañías

El Chef Judicial

El mejor restaurante para un viaje culinario por el Mediterráneo

Con un coqueto diseño y una gastronomía familiar sin estridencias innecesarias

Cocina sencilla con recetas tradicionales y notas de creatividad del chef Paco Carrascosa en un negocio que tiene como lema «hacer feliz a la gente». Buena relación calidad precio en esta taberna mediterránea en pleno barrio de Salamanca con una propuesta con precios muy competitivos, la apuesta de Pepe Caldas en un restaurante de coqueto diseño haciéndonos llegar una gastronomía familiar sin estridencias innecesarias. Buen producto para un restaurante idóneo de comidas de negocio, de almuerzos semanales que se teñirán de sonrisas y buen ambiente.

La propuesta se inicia con clásicos mediterráneos sembrados de cremosidad con una ensaladilla rusa de merluza de pincho y langostinos, sabrosa patata cocida en deliciosa unión con la zanahoria acariciada por la ligereza de una mayonesa que se destapa como el mar blanco perfecto por el que se dejarán fluir las colas de un buen langostino.

paella puerto lagasca

Paella

Los aires del sur continúan con un salmorejo con virutas de jamón ibérico nacido de una mezcla suave de buenos tomates, con aceite de Arberquina y ajo adornado con huevo rallado, agradable sabor que mejoraría incrementando la cremosidad de su textura para encumbrar el más genuino salmorejo cordobés. Calidad en la materia prima y cocina saludable con unas anchoas de Santoña doble cero que impregnan de salinidad marina una cama de aguacate aderezadas con AOVE. Primeros compases que bañaremos con una manzanilla de Sanlúcar de Barrameda, un «Xixarito» de Bodegas Barón, uva palomino para una nariz intensa con notas de maderas viejas, boca carnosa con buena acidez y un recorrido agradable con un final levemente amargoso.

Naturalidad en la cocina con adecuadas presentaciones de los pases que atraerán de manera inevitable al comensal con unas destacadas alcachofas confitadas en AOVE, buena calidad de la materia prima ensalzando la huerta de Puerto Lagasca, resaltando su gusto al marcarse a la brasa y acompañarse de aceite de oliva y jamón crujiente. Producto de la huerta que presenta como otros de sus máximos exponentes una ensalada de las de antes, con tomates que saben a tomates y entusiasman, amalgama de este vegetal que se acaricia suavemente con ríos de aceite de oliva y se acompaña de lascas de bonito del norte.

Su versión evolucionada se presenta en una sinfonía de tomates, repletos de colorido procedentes de varias zonas de España acompañados de tapenada casera para imprimir salinidad y notas amargas, cebolla roja y tostas de pan de aceite. Pase ligero y apetecible idóneo para almuerzos que concilian deliciosos sabores con la apuesta por una cocina familiar y aires saludables.

Langostino

Langostino

Variada bodega de la que en esta ocasión elegiremos un tempranillo de Rioja, «Roda I». Vino de carácter, regalando sensaciones de fruta negra, guiños de ciruela, acompañada de notas minerales y chocolate con matices balsámicos para crecer, embriagando la nariz. En boca, un vino de volumen y complejidad frutal que nos envuelve con taninos fundidos, un vino de elegante de persistente final, con excelente recuerdo por vía retro nasal invitándonos a disfrutarlo y seguir bebiendo.

Maridaje que nos abre el paso a uno de los platos estrella de Puerto Lagasca, sabrosísimos canelones de carrillera de ternera cocinada a baja temperatura, esencia de melosidad. Sabores que se derriten en la boca y encandilarán al comensal. Pases tradicionales con presentaciones creativas invitando a una cocina de proximidad y familiar con la carrillera ibérica con puré de patata, dando continuidad a una cocina delicada y suave, adquiriendo notas de potencia en los sabores a partir del osobuco de añojo con chips de hortalizas con salsa a base de verdura. Contundencia en los sabores para los amantes de las carnes más maduradas.

Tarta de limón

Tarta de limón

Orígenes canarios homenaje al precursor de este restaurante con unas papas arrugadas con mojos canarios (picón y verde) aderezadas con sal gorda para acompañar las carnes de Lagasca.

Buena técnica en la fritura en las manos del chef granadino Paco Carrascosa con unas suaves croquetas de jamón ibérico y espinacas que se deshacen en la boca acompañadas de salsa de tomate. Clásicos del mar y la tierra con los chanquetes, escoltando a estos peces platinos, los pimientos asados y los huevos camperos. Ligero rebozado haciendo lucir recuerdos cordobeses con las berenjenas laminadas y bañadas con miel de caña. Un tradicional pase «Hispano» conformado por patatas fritas, huevo de corral y jamón ibérico o unos adictivos torreznos de Soria que se doran en sartén. Suculentos bocados que demuestran que los platos más sencillos pueden convertirse en las manos de un buen chef en el más auténtico bocado gourmet.

Salmorejo

Salmorejo

El proyecto gastronómico de Puerto Lagasca con un precio en torno a 50 euros por persona culmina con un homenaje a la repostería, pasión dulce del chef Carrascosa que nos invita a pecar con una selección de postres caseros entre los que destacan la Puertorrija con crema inglesa mojada en leche con canela y dorada a la sartén, la tarta de almendra pura o la deliciosa tarta de limón con merengue tostado, símbolos de un arte culinario que se fundamenta en la maestría de un chef granadino que hace del cariño y la tradición la esencia básica de sus fogones.

Calle de Lagasca, 81, Salamanca, 28006 Madrid

comentarios
tracking