Viajar
Ni la Alhambra ni la Sagrada Familia: el mejor monumento de Europa es español, según los extranjeros
Con más de 85 millones de turistas al año, España se lleva una vez más el primer puesto
España es un país impresionante con encantadoras ciudades medievales, edificios históricos, paisajes naturales y un patrimonio cultural muy diverso. La mayoría de los turistas hacen un viaje rápido a Barcelona, Madrid o Valencia, o se quedan en zonas de costa para disfrutar de una de las muchas playas de calidad que poseemos del Atlántico y el Mediterráneo mientras disfrutan de la comida española más deliciosa.
Según los últimos datos publicados por la ONU Turismo, anteriormente conocida como la Organización Mundial del Turismo, Francia sigue siendo el país más visitado de todo el mundo. Sin embargo, España presume de un destacado segundo lugar con más de 85 millones de turistas internacionales. El potencial y la riqueza de nuestros país es incalculable, al igual que los atractivos y monumentos históricos que llaman la atención a los extranjeros.
Aunque spots como Sevilla, Granada o Toledo siempre están en la lista de los más visitados, un estudio reciente realizado por Iglu Cruise demuestra que hay un monumento por el que sienten especial predilección los turistas. Con casi 50 sitios en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, sorprende que no sea ni la Alhambra, ni la Sagrada Familia, ni el Alcázar de Toledo, ni el de Segovia ni ninguna de las majestuosas catedrales, basílicas o iglesias que pueblan el extenso territorio español (Burgos, Zaragoza, León, Santiago de Compostela...).
Si deseamos visitar el monumento más «querido» por los extranjeros que visitan nuestro país debemos viajar al sur de la Península, concretamente a Córdoba, que curiosamente ostenta un récord mundial. La ciudad andaluza es la única con cuatro bienes considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: la Mezquita-Catedral (1984), el centro histórico que la rodea (1994), la Fiesta de Los Patios (2012) y Medina Azahara (2018). En el caso de los patios, fue inscrito en 2012 en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Aunque la primavera es su momento estelar, cuando la fragancia de flores como el azahar y el jazmín acompañan siempre, también es baladí visitarla el resto del año y ser testigo de las cuatro culturas que en ella conviven: romana, cristiana, islámica y judía.
Según la compañía, más del 86 % de turistas ha valorado la Mezquita de Córdoba con la máxima puntuación, siendo el mejor valorado no solo en España, sino en el resto de Europa. Solo en 2023, casi dos millones de personas la visitaron y 1.600.000 le otorgaron cinco estrellas.
Sin duda, es el gran monumento de la ciudad y, en la actualidad, tiene la consideración de catedral cristiana de Córdoba. Su construcción comenzó en el año 785. Fue la segunda mayor del mundo, por detrás de la Meca, hasta la construcción de la Mezquita Azul y en 1984 la Unesco la catalogó como Patrimonio de la Humanidad. Reúne los estilos omeya, gótico, renacentista y barroco.
La gran Mezquita consta de dos zonas diferencias, el patio o sahn porticado, donde se levanta el alminar (bajo la torre renacentista), única intervención de Abd al-Rahman III, y la sala de oración o haram. La parte más famosa sin duda es su interior, donde filas y filas de arcos de herradura pintados de rojo y blanco dan la bienvenida a los visitantes. En 1523, además, tras la conquista cristiana, se construyó en su interior la catedral, en la que destaca el retablo mayor, el retablo barroco y la sillería del coro en madera de caoba.