El curioso pueblo europeo que celebra dos veces al año la Nochevieja

2025 acaba de empezar y fueron muchos los que despidieron el año pasado rodeado de amigos y familiares, con una rica cena, brindando con champán y, cómo no, tomando las tradicionales uvas con las campanadas de la Puerta del Sol. Y parece que todo se que da ahí. Ya nos despedimos del pasado y comenzamos un nuevo año lleno de oportunidades. No obstante, en Europa, hay un pequeño pueblo en Suiza que celebra por partida doble lo que conocemos como Nochevieja.

Estamos hablando de Appenzell, una pequeña localidad suiza de 7.000 habitantes que se encuentra a tan solo dos horas en tren de Zúrich y que, sin duda, parece sacada de un cuento, rodeada de montañas y paisajes alpinos y con coloridas casas con fachadas tradicionales.

Las dos Nocheviejas de Appenzell

La región de Appenzell destaca por su profundo respeto y preservación de las tradiciones culturales, que han sido transmitidas de generación en generación. Estas costumbres reflejan no solo la herencia histórica de la región, sino también su conexión con la naturaleza y la vida alpina. Entre las más destacadas se encuentran las celebraciones del Silvesterchläuse, el arte del yodel y el uso de instrumentos tradicionales como los cuernos alpinos.

Una de las tradiciones más icónicas de Appenzell es el Silvesterchläuse, una celebración de Nochevieja única en su tipo, que tiene lugar dos veces al año:

• El 31 de diciembre, siguiendo el calendario gregoriano.
• El 13 de enero, según el calendario juliano.

Este festejo es un homenaje al pasado histórico, cuando algunos habitantes de la región no adoptaron el calendario gregoriano tras su introducción en el siglo XVI.

Durante el Silvesterchläuse, los residentes, conocidos como los Chläuse, se visten con trajes tradicionales que se dividen en tres categorías principales:

• Schöne (bellos), con trajes adornados con motivos pastorales y sombreros decorativos elaborados con escenas alpinas pintadas o esculpidas.
• Wüeschte (feos), con disfraces grotescos y máscaras que representan figuras demoníacas, destinados a ahuyentar los malos espíritus.
• Naturchläuse (naturales), con atuendos hechos de materiales rústicos como corteza, paja y madera.

Los Chläuse desfilan por las calles y visitan hogares, entonando cánticos tradicionales conocidos como Zäuerli, que son melodías sin acompañamiento musical. Esta tradición busca desear prosperidad y buena fortuna para el nuevo año.