Medusa, tigre o delfín: ¿qué tipo de madre eres?

Un tigre, una medusa y un delfín nada tienen en común, aparte de que dos de ellos son animales marinos y que su nombre lo han recibido distintos modelos de crianza. Estilos parentales hay tantos como padres aunque en líneas generales haya algunos rasgos propios que permita clasificarlos en autoritarios, permisivos y democrático.

Esta es la manera en que los progenitores reaccionan y responden a las emociones de sus hijos –así los define el psicólogo John Gottman– y deciden actuar en consecuencia, con el fin de educarle. De ello depende en gran medida el desarrollo emocional y social de los niños, su manera de relacionarse consigo mismos y con el resto del mundo.

Madre tigre

Las madres más estrictas y serias son representadas con el tigre. Estas establecen límites rígidos, sobre todo en la gestión del tiempo libre, ya que se prioriza el aprendizaje. Su más conocida representante Amy Chua, autora de Madre tigre, hijos leones, quien defiende la educación estricta del método chino para formar niños disciplinados y exitosos.

Las madres tigre no permiten notas escolares por debajo del sobresaliente. El peso de Confucio en este estilo parental es definitivo, ya que según él, los padres tigre han de educar a sus hijos fiera para ser leales y traigan el honor a la familia mediante el éxito académico y social.

Aunque tiene sus aspectos positivos, también los hay negativos. Entre ellos, sus detractores destacan que puede generar frustración en los niños, impactar negativamente en su autoestima y fomentar una autoexigencia que pueda resultar dañina en última instancia.

Madre medusa

En el extremo opuesto de los modelos parentales, se encuentran las medusas –concretamente se refiere a las partes blandas–. Como este animal marino, estas madres se dejan llevar por la corriente, es decir, no muestran firmeza ni autoridad. En comparación con las estrictas normas de las tigre, estas madres se caracterizan más por la pasividad.

Contrario a lo que pueda pensarse, no se trata de dejadez maternal, sino de la creencia de que los hijos podrán ir adaptándose a las situaciones que le sobrevengan y avanzar en su vida sin marcarle demasiado el camino. En este intento de fomentar la autonomía del niño sobre todas las cosas, se consigue en realidad lo contario.

Madre delfín

Ni en un extremo ni en otro se hallan las madres delfines. Son flexibles y buscan el equilibrio entre la disciplina y los límites y la libertad. Una madre delfín está pendiente de su hijo, pero a la vez le da el suficiente margen como para aprender a través de sus propios errores. Delegar responsabilidades es la manera que tienen este tipo de padres de fomentar la autonomía del niño.

Hoy ha surgido el término 'disciplina positiva' para denominar el estilo parental democrático, aquel que prima la creatividad, el pensamiento crítico y la comunicación.