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Tristan Thompson se disculpa con Khloé Kardashian tras admitir una nueva paternidad
Su nuevo hijo es fruto de una aventura con su entrenadora personal
El drama de Tristan Thompson y Khloé Kardashian está basado principalmente en todas las veces que el jugador de la NBA ha engañado a la empresaria estadounidense y, en consecuencias, todas las que esta le ha perdonado. La pareja comenzó a salir en 2016, desde entonces, han mantenido una relación intermitente. Entremedias, les ha dado tiempo, además a tener una hija juntos, True, que nació en abril de 2018. Ese mismo mes, salió a la luz un vídeo en el que se veía a Thompson con una mujer que no era Khloé, lo que provocó que, a semanas de dar a luz, rompiese su relación con él.
Sin embargo, en verano de 2020 se reconciliaron, aunque tan solo un año después anunciaron que volvían a estar separados. Tuvieron que pasar bastantes meses hasta que se hicieran pública la razón que podría haber llevado a la ruptura. En diciembre de 2021 se dio a conocer que el deportista había sido demandado por Maralee Nichols, su entrenadora personal, por la manutención de su supuesto tercer hijo.
El bebé fue concebido en marzo de 2021, cuando la pareja aún estaba dándose una oportunidad, aunque Tristan aseguró a Nichols que su relación con la hermana de Kim Kardashian ya había acabado.
Tras someterse a unas pruebas de paternidad, Thompson se ha visto obligado a reconocer al que es su tercer hijo (antes de True, tuvo otro, Prince Oliver, con Jordan Craig) y pedir disculpas públicamente. «Hoy, los resultados del test de paternidad revelan que he tenido un hijo con Maralee Nichols. Asumo toda la responsabilidad de mis actos. Ahora la paternidad se ha confirmado y espero poder criar a ese niño. Me disculpo sinceramente con todo el mundo a quien he podido herir o decepcionar con todo este asunto», explica.
También ha tenido palabras para ella. «Khloé, no mereces esto. No mereces el dolor y la humillación que te he causado. No mereces la manera en la que te he tratado en estos años», ha reconocido. «Siento el mayor respeto y amor por ti, aunque no lo creas. Una vez más, lo siento muchísimo», concluye.