Isabel de Bélgica se gradúa con honores en Oxford

Este martes, 23 de julio, el sol brilló con especial intensidad en el corazón de la Familia Real belga. A las 13:00 horas, el Lincoln College, con su majestuoso Teatro Sheldonian, se convirtió en el escenario de una ceremonia de graduación memorable y cargada de orgullo para los Reyes Felipe y Matilde, y toda la familia real belga. La celebración se centró en la figura radiante de la princesa Isabel, quien culminó con éxito un importante capítulo en su vida académica.

Vestida con la indumentaria tradicional de graduación, la Princesa Isabel, que también cuenta con el título de duquesa de Brabante, deslumbró con su elegancia y sofisticación. Llevaba el birrete, una falda negra que caía con gracia, medias, zapatos de tacón y una camisa blanca adornada con un delicado pañuelo al cuello. Era una imagen de seriedad y orgullo, que quedará para siempre en el recuerdo.

Los Reyes Felipe y Matilde, no podían haber estado más orgullosos. Matilde brillaba en un vestido de manga larga en tonos fucsia y naranja de la firma Natan, mientras que Felipe acompañaba el momento con un porte igualmente majestuoso. Los Príncipes Emmanuel y Eleonore, radiante vestida de color verde con un diseño de Maje, se unieron a sus padres en esta jornada tan especial. A pesar de la ausencia del príncipe Gabriel, el apoyo y la unidad de la familia real se hicieron sentir en cada rincón de la ceremonia.

Una vez concluido el acto oficial, la escena se transformó en un festival de sonrisas y abrazos. La Princesa Isabel, con su toga negra finalmente colocada sobre los hombros, se unió a sus compañeros graduados con una sonrisa radiante que desbordaba orgullo y felicidad. La joven de 22 años ha completado con éxito su licenciatura en Historia y Política en el Lincoln College de Oxford, un logro académico que sigue las huellas de su padre, el Rey Felipe, quien cursó estudios similares en Trinity College.

En todo momento, la alegría era palpable. Isabel no podía ocultar su satisfacción. Su sonrisa, amplia y sincera, era un reflejo perfecto del orgullo que sentía no solo por su propio logro, sino también por la inmensa alegría de compartir este día grande con su familia.

Rumbo a Estados Unidos

Este momento marca un hito significativo para la princesa, que es la mayor de la nueva generación de la familia real belga. Su trayectoria académica no solo es motivo de orgullo para su familia, sino que también establece un modelo para otras Casas Reales que observan cómo se forman las futuras líderes de la era moderna.

El próximo capítulo de su vida la llevará a Estados Unidos, donde comenzará un máster de dos años en la prestigiosa Universidad de Harvard, situada en Boston, tal y como informó recientemente la Casa Real belga. Será el renombrado Harvard Kennedy School. Este centro de estudio es uno de los doce prestigiosos colegios que componen la icónica universidad y promete ser el escenario perfecto para que la joven heredera amplíe aún más sus horizontes.

Además, la joven ha sido seleccionada para una beca Fulbright, un programa de intercambio educativo internacional del Departamento de Estado de Estados Unidos. Este prestigioso programa, que opera en más de 160 países, ha sido el trampolín para muchos distinguidos antiguos becarios que han sido galardonados con el Premio Nobel. La selección de Elisabeth para esta beca subraya su destacada trayectoria académica y su potencial como líder global en el futuro.