El hombre que aparece más veces en James Bond que 007 y no es actor

¿Sabías que hay un personaje que aparece más veces en las películas de James Bond que el propio agente 007? Y lo más curioso de todo es que no es actor. Este actor ha estado presente en un total de 17 películas de la saga, algo que ni Sean Connery, ni Pierce Brosnan, ni Daniel Craig han conseguido. Aunque no lleva pistola ni trajes elegantes, siempre tiene un espacio reservado en cada nueva entrega.

Pero, ¿quién es? Se trata de Michael G. Wilson, un neoyorquino cuya presencia en la saga ha trascendido el papel de cualquier actor, convirtiéndose en una pieza clave detrás de cámaras.

Michael G. Wilson no es un nombre conocido para los seguidores que anhelan ver a 007 o a los antagonistas más memorables, sin embargo, su imagen se muestra en la saga en múltiples roles. Su debut se remonta a 1962, año en que hizo su presencia en James Bond contra Goldfinger. Sin embargo, a partir de la década de 1970, con su incorporación a Eon Productions, Wilson se estableció como un elemento crucial en la saga, no en su papel de actor, sino en su rol de productor. Su participación en la cinta superó una simple colaboración esporádica. En 1977, con la película La espía que me amó, empezó a tener un rol más proactivo y, en 1979, asumió la posición de productor ejecutivo de Moonraker, posición que ha conservado hasta el presente.

Lo que realmente distingue y hace especial Wilson es su habilidad para mantenerse presente en las películas de Bond sin realmente ser el foco de atención. De hecho, a lo largo de las décadas, ha aparecido en cada película de la saga, ya sea con un papel sin diálogo o simplemente como un extra que ayuda a darle vida al entorno. Entre sus cameos más conocidos están su aparición como soldado en Goldfinger, patrocinador de la ópera en The Living Daylights, hombre en el casino en El mundo nunca es suficiente, portador del féretro en Skyfall, y oficial militar en la fiesta de Spectre.

Su implicación en la saga Bond es inquebrantable, habiendo producido, coproducido y participado en la creación de cada una de las películas oficiales de James Bond desde Moonraker hasta No Time to Die. Lo que comenzó como un cameo inocente se ha convertido en una tradición, y con ello, Wilson se ha convertido en una figura fundamental en la historia del cine de espías.

Por otro lado, en su vida personal, Wilson, que está a punto de cumplir 83 años, no solo ha sido una figura prominente en la producción de las películas, sino que también tiene un lazo muy cercano con el legado de James Bond. Es hijastro de Albert «Cubby» Broccoli, el productor original de la saga, y medio hermano de la actual coproductora, Barbara Broccoli.