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El hotel de Madrid que ha conquistado a Richard Gere y eligió para reunir a su familia esta Navidad
El galán de Hollywood reservó una suite en el hotel InterContinental para ver la cabalgata de Reyes, junto a su mujer Alejandra y sus dos hijos pequeños
vendió su casoplón de Connecticut por 10,7 millones de dólares y se instaló en la exclusiva urbanización de La Moraleja. Si a Richard Gere le preguntasen por qué se mudó a Madrid, la respuesta sería clara y además muy sincera: por amor. El eterno galán de Hollywood acaba de comenzar una nueva etapa de su vida en España para estar al lado de su mujer, la empresaria gallega, Alejandra Silva, y sus dos hijos en común.
Resulta habitual ver al protagonista de Pretty Woman en el restaurante Áurea, del grupo Paraguas, en La Moraleja. Esta Navidad también descubrió la chocolatería San Ginés para tomar unos churros o visitó las Casas Colgantes de Cuenca, para comenzar el año. La guinda de la Navidad la puso el día 5 de enero, viendo la cabalgata de Reyes de Madrid, junto a sus pequeños; Alexander, de 5, y James, de 4 años. Según ha podido saber El Debate, en exclusiva, lo hizo desde el hotel InterContinental de la Castellana.
Richard Gere reservó una suite de las plantas más altas del hotel para poder ver la cabalgata con sus dos hijos, su mujer y unas amigas. Un plan familiar muy navideño, sin renunciar al confort que ofrece esta ubicación. Además el hotel InterContinental organizó el día 5 de enero, una merienda de reyes, en el lobby del hotel, con roscón, churros y tortitas, aunque la familia Gere optó por quedarse en su habitación. Trataron de que su estancia fuera discreta y no llamar la atención en ningún momento.
El imponente edificio que ocupa hoy el InterContinetal fue inaugurado en 1953 por el arquitecto Luis Martín-Feduchi (el mismo que proyectó el emblemático edificio Capitol). Se trata de un establecimiento cargado de historia: se construyó sobre el palacio del duque de Aliaga. El proyecto se le encomendó al arquitecto Luis Martínez-Feduchi, uno de los más prestigiosos de la época —autor también, entre otros emblemas, del edificio Carrión de la plaza de Callao—, quien conservó la chimenea de mármol de Carrara del salón Toledo y el interior de las puertas originales, además de la «placita» que corresponde a la entrada de carruajes del palacio. En el jardín interior, Ángel Ferrant, escultor estandarte del surrealismo y de la escultura cinética, fue el responsable de la fuente art déco.
La apertura del hotel transformó la capital española en una sucursal de Hollywood. Frank Sinatra, Elizabeth Taylor, Gary Cooper y Sophia Loren, entre otros artistas, pasaron largas temporadas en Madrid rodando las grandes producciones de la época.
El hotel dispone de 302 habitaciones, 33 suites, de las que siete son presidenciales. Todas tienen la misma orientación, con vistas panorámicas a la Castellana. Y luego la Suite Real, que es la joya de la corona.