Roberto Carlos, un abuelo millonario que anda metido en problemas

«Roberto Carlos da Silva Rocha, «El Hombre Bala», fue el mejor lateral de vocación ofensiva visto por el fútbol", dice en su propia web. Hombre Bala en el césped y en la vida también, a juzgar por su trayectoria sentimental. El lateral izquierdo es padre de 11 hijos nacidos de relaciones con siete mujeres diferentes.

Roberto Carlos atraviesa un momento personal complicado tras su separación de Mariana Luccon, con quien estuvo casado desde 2009. Dicen que se ha ido del domicilio familiar de lujo a vivir a otro lugar temporalmente.

Según reveló el programa «Fiesta» de Telecinco, el futbolista de 51 años tiene entre manos su complicado divorcio de Luccon. Un proceso legalmente nada fácil debido su inmensa fortuna acumulada. El brasileño nacionalizado español acumularía unos 160 millones de euros. Una fortuna tan amplia como su propia familia. Una fortuna que ahora toca repartir.

Su primera esposa, Alexandra Pinheiro, es la madre de tres de sus hijos: Roberta, Giovanna y Roberto Junior. Giovanna le hizo abuelo cuando él tenía 44 años. Un abuelo que tuvo mucho dinero y muchas parejas a lo largo de su vida.

La lista es larga. La húngara Alexa Fedra, con quien tuvo a Christopher; la mexicana, Dora Robles, madre de Rebecca Carla; Barbara Thurler, la abogada brasileña con quien tuvo a Bernardo y Betina. Con Alessandra Martins tuvo a Luca; con la periodista Simone Hamilko a Carlos Eduardo. Y por último, con Mariana Luccon mantuvo una relación de la que nacieron dos hijas, Manuela y Marina. Relación que está rota y que le ha llevado a hacer mudanza. No vive en una habitación en Valdebebas de la Ciudad Deportiva del Real Madrid, tal y como ha comunicado el propio futbolista a El Debate.

Su carrera

Desde 2016, forma parte de la nómina del club madrileño. Desempeñó varias misiones como embajador de imagen del club y como formador de sus categorías inferiores, y comentarista de Real Madrid Televisión, puesto que ocupa en la actualidad.

«Once años en Los Blancos, cuatro títulos de La Liga, tres títulos de la Liga de Campeones, dos títulos de la Copa América, una Copa Mundial y aquel tiro libre contra Francia no llegan a contar la historia completa. Sus goles desafiaron las leyes de la física; su velocidad, fuerza y poder explosivos fueron deslumbrantes, y estableció nuevos estándares sobre cómo debería jugarse un bello partido. Roberto Carlos ama el fútbol y el fútbol ama a Roberto Carlos», continúa su relato biográfico.

Su currículum es impecable, su vida compleja. Hace 10 años le confesaba a Josep Pedrerol: «Ahora vivo con Manuela y tengo varios hijos por ahí. Tengo en Brasil, siete. Tengo una en México, tengo una en Hungría que vive en Alicante y los demás viven en Brasil». Eso, hace diez años. Hoy suma un nuevo divorcio.