Restos del anfiteatro romano de León
Hallan nuevos restos de un gran anfiteatro romano en León con capacidad para 8.000 espectadores
La edificación fue levantada por la Legio VI y ampliada por la Legio VII Gemina entre finales del siglo I y principios del siglo II
Finalizada la guerra con los cántabros, la Legio VI Victrix y más tarde la Legio VII Gemia se asentaron en León dejando el único campamento militar de la península que permaneció activo hasta el fin del Imperio romano. Ahora, arqueólogos han encontrado los restos del anfiteatro romano, un edificio destinado a la diversión de los legionarios y que pudo albergar alrededor de 8.000 espectadores.
El descubrimiento se produjo en una intervención arqueológica durante los pasados meses de agosto y septiembre en una zona donde había indicios de la existencia de restos vinculados al anfiteatro. En el año 1994, según recoge el informe arqueológico de la Comisión de Patrimonio de la Junta de Castilla y León, aparecieron vestigios de esta estructura en una parcela en la cercana calle de Cascalería.
Recreación de la ciudad romana
Años después, en 1999, comenzaron nuevas excavaciones arqueológica en otra parcela de dicha calle en la que se recuperaron restos similares a los hallados cinco años atrás. Dichos restos se encuentran musealizados en el interior de una Cripta Arqueológica gestionada por el Ayuntamiento de León, siendo posible actualmente su visita pública.
Asimismo, las excavaciones en otros solares de las calles Cascalería y La Rúa permitieron documentar otro tramo importante de la edificación romana.
Restos del anfiteatro romano de León
Los investigadores han registrados al menos tres fases sucesivas de construcción hasta conformar su aspecto final. Según el informe, la fase inicial fueron levantadas por las tropas de la Legio VI Victrix en un momento indeterminado del siglo I d.C., tal y como atestiguan los materiales arqueológicos recuperados en las excavaciones. Mientras que las ampliaciones, que responden al crecimiento de la población, obligando a aumentar el tamaño para disponer de un aforo mayor, se atribuyen a la Legio VII Gemina, entre finales del siglo I y principios del siglo II.
Gracias a los hallazgos realizados podemos saber que el anfiteatro era de carácter militar de planta elíptica, con unas dimensiones de unos 80 metros de largo por 50 metros de ancho; con un aforo en su primera fase de entre 6.000 a 6.5000 espectadores y de unos 8.000 tras las reformas de ampliación.
La Comisión Territorial de Patrimonio indica que los últimos restos hallados del antiguo anfiteatro en la calle La Rúa deberán conservarse in situ para evitar cualquier tipo de afección sobre los mismos, con la posibilidad de hacerlos accesibles para una potencial futura visita pública.
