La OTAN inicia en Noruega las mayores maniobras militares en 4 años con la vista puesta en Rusia

Es cierto que desde Jørstadmoen (Noruega) hasta la ciudad rusa más cercana, San Petersburgo, hay 1.000 kilómetros en línea recta. Es cierto que son unas maniobras que llevaban dos años previstas. Pero dadas las circunstancias de la crisis de Ucrania, las maniobras que se inician hoy en Noruega adquieren una importancia extraordinaria.

Más de 35.000 militares de Tierra, Mar y Aire, pertenecientes a 28 países de la OTAN, a los que se ha sumado Suecia y Finlandia, inician hoy en la localidad noruega de Jørstadmoen, a 200 kilómetros al norte de Oslo, las mayores maniobras militares de los últimos 4 años. Son los ejercicios Cold Response 2022, unas maniobras que, según la propia OTAN «es un ejercicio defensivo bajo un escenario del Artículo 5 de la OTAN».

El artículo 5 de la OTAN es ese que dice que «Las Partes acuerdan que un ataque armado contra una o más de ellas, que tenga lugar en Europa o en América del Norte, será considerado como un ataque dirigido contra todas ellas».

Estas maniobras tienen lugar cada dos años, es decir, llevaban dos años planificadas. Y, normalmente, son las mayores maniobras militares que realiza la OTAN cada año. Por poner un ejemplo, las maniobras de 2018 fueron las más numerosas desde la Guerra Fría con la participación de 50.000 soldados y 10.000 vehículos. Las maniobras de 2020 se vieron mermadas por la pandemia.

Mensaje a Rusia

Pero, dadas las circunstancias que se dan este año, nadie pone en duda que la edición de este año está especialmente dirigida a Rusia. De hecho, todas las ediciones de estos ejercicios lanzan un mensaje subliminal a Vladimir Putin.

Ya en los ejercicios de 2018, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg advirtió que «Rusia observará el ejercicio, porque no tenemos nada que ocultar. Este ejercicio no está dirigido contra ningún país específico, el objetivo es asegurarnos de que la OTAN mantiene su capacidad disuasoria para evitar conflictos". Y añadió, “no queremos una nueva carrera de armamentos, no queremos una nueva Guerra Fría. Pero tenemos que asegurarnos de que nadie pueda creer que la OTAN no puede proteger a sus aliados y, por lo tanto, tenemos que realizar este tipo de ejercicios».

Al mismo tiempo, en estas maniobras participan este año Finlandia y Suecia, dos países que han reclamado ayuda en virtud del artículo 4 de la OTAN, ese que afirma que «las Partes se consultarán cuando, a juicio de cualquiera de ellas, la integridad territorial, la independencia política o la seguridad de cualquiera de las Partes fuese amenazada». Tanto Finlandia como Suecia se consideran amenazadas por la cercanía de Rusia y porque, al igual que sucedió con Ucrania, han recibido la invitación de unirse a la Alianza Atlántica.

La directora del departamento de información del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Maria Zakharova, advirtió el pasado día 10 que «el ingreso de Finlandia y Suecia en la OTAN tendría graves consecuencias político-militares, que requerirían una respuesta de nuestro país».

Participación española

España ha enviado a Noruega un total de 270 soldados que participarán en los ejercicios de Tierra. De hecho, el traslado de los tanques Leopardo y vehículos blindados Pizarro por carretera desde Madrid causó un gran revuelo en la autopista A-1.

Los soldados españoles participaron previamente en las maniobras Brilliant Jump 2022 en la misma Noruega. En esa ocasión se unieron 2.500 soldados de Francia, Italia, Polonia y España.