Pence se desmarca de los ataques de los republicanos al FBI: «Somos el partido de la ley y el orden»
El exvicepresidente de EE.UU. condenó los ataques de miembros del Partido Republicano al FBI por el registro de la casa de Trump
Al exvicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, no le gusta la imagen que han dado sus correligionarios del Partido Republicano tras el registro el 8 de agosto por parte del FBI de la casa en Florida del que había sido su «jefe», el expresidente Donald Trump.
Pence, durante un discurso pronunciado en el Saint Anselm College de New Hampshire, condenó los ataques efectuados contra el FBI por parte de fanáticos de Trump.
El exvicepresidente abogó por denunciar los abusos de la fiscalía general en la redada en la residencia de Mar-a-Lago, donde los agentes federales buscaban documentos secretos y confidenciales supuestamente extraídos por Trump de la Casa Blanca al finalizar el mandato, sin atacar al FBI.
«Quiero recordar a mis compañeros republicanos que podemos responsabilizar al fiscal general por la decisión que tomó sin atacar al personal policial del FBI», afirmó Pence que, por otro lado, subrayó que «el Partido Republicano es el partido de la ley y el orden», señaló el exvicepresidente en su discurso.
Y añadió: «Nuestro partido apoya a los hombres y mujeres que sirven en la 'delgada línea azul a nivel' federal, estatal y local. Y estos ataques al FBI deben cesar».
Pence hizo estas declaraciones en referencia al ataque la semana pasada contra una oficina del FBI en Cincinnati por parte de una persona armada con un fusil de asaltos AR-15 que fue abatido por los agentes.
El domingo pasado, un hombre impactó su vehículo contra una barrera de seguridad en el Capitolio de Washington y abrió fuego con un arma antes de suicidarse.
Todos esos sucesos se enmarcan en el contexto de la creciente indignación en sectores republicanos por la investigación contra Trump y el registro de su residencia.
Algunos sectores del Partido Republicano incluso pidieron desmantelar el FBI, a lo que Pence contestó que «las peticiones de eliminar la financiación al FBI son tan malas como las peticiones para eliminar la financiación de la policía».
Esas peticiones para cortar la financiación a la policía se popularizaron tras el asesinato de George Floyd por parte de la policía de Minneapolis y el estallido del movimiento Black Lives Matter.