Saakashvili, ex presidente de Georgia, recuerda que advirtió a Schroëder y a Occidente de los planes de Putin

Mikheil Saakashvili, cumple condena en Tbilis aunque estos días se encuentra en un hospital tratando de recuperarse de los males consecuencia, según denuncia, de un trato inhumano.

El ex presidente de Georgia, la exrepública soviética que Putin ocupó parcialmente, logró deslizar una carta a The Times en la que recuerda que Putin ya le dijo hace tiempo, en 2004, que tenía planes para Ucrania: invadirla. «Todo lo que está haciendo ahora, me lo dejó más o menos claro en nuestra primera reunión», detalla.

Saakashvili, de 55 años, cuenta que viajó a Berlín para advertir de los planes de Putin después de aquella conversación. Se entrevistó con Gerard Schröeder, por entonces Canciller de Alemania, pero éste, como reproduce The Times, no se inmutó.

Schröeder ha sido objetivo de múltiples criticas por su colaboracionismo con Rusia y su rechazó a condenar la guerra de Putin. Durante años ha estado al servicio y formado parte del consejo de Administración de empresas rusas de las que tras producirse la invasión de Ucrania, se ha visto obligado, por la presión, a abandonar.

Cuando advertí a Occidente sobre Putin, me descartaron como un lunático volátil y amargadoMikheil Saakashvili, expresidente de Georgia

Saakashvili, no cejó en su empeño de informar a los líderes europeos de las intenciones del presidente de la actual Federación Rusa. «Cuando advertí a Occidente sobre Putin, me descartaron como un lunático volátil y amargado».

El líder georgiano cayó en desgracia después de que se difundiera un vídeo de las prisiones del país donde los detenidos eran sometidos a torturas

El líder georgiano cayó en desgracia después de que se difundiera un vídeo de las prisiones del país donde los detenidos eran sometidos a torturas.

El expresidente pretendía acercarse a la Unión Europea y a la OTAN y alejarse de la influencia soviética. Suyo fue el programa de eliminación de los símbolos soviéticos de Georgia, hoy mucho más desarrollado y occidental en forma y fondo que Armenia, su otro vecino.

Bombardear Osetia del sur

El detonante de su derrocamiento y condena por abuso de poder, fue la orden de bombardear Osetia del sur, una provincia bajo control de los separatistas que el Kremlin apoyaba. El proceder de Rusia fue similar al que ha desempeñado en el Dombás, donde repartió pasaportes rusos y ejerció su influencia para consolidar una sociedad favorable a Moscú.

Saakashvili, fue presidente entre 2004 y 2013. Llegó al poder después de la «revolución de las rosas» y abordó un proceso de reformas estructurales profundo con el objetivo de terminar con la corrupción e impulsar el desarrollo de este pequeño país fronterizo también con Rusia y Turquía.

Ucrania su segundo país

El expresidente se exilió en Ucrania y llegó a ocupar el puesto de gobernador en Odesa. En 2015 llegó a ser el político más popular (se había nacionalizado), pero su enfrentamiento con el por entonces presidente Petro Poroshenko le valió que éste le retirara la ciudadanía.,. Volodimir Zelenski se la devolvió en 2019.

Putin dejó el territorio de Georgia reducido a una quinta parte

Las columnas del ejército ruso llegaron a estar hace 15 años, en 2008, a menos de 30 kolómetros la capital georgiana. Conocida como la guerra de los cinco días, Francia intervino como mediador para lograr un alto fuego. La tregua se tradujo en una paz que supuso que Putin dejara el territorio de Georgia reducido a una quinta parte.

La mala imagen de Putin en Georgia

Eso explica la pésima imagen del Kremlin y la inclinación o mirada a Europa, pese a su gobierno actual. En Tbilis son frecuentes los carteles contra Putin y manifestaciones a favor de Ucrania. Su experiencia se entiende como el precedente de lo que vendría después: anexionarse la península de Crimea e intentar conquistar el Donbás y el resto de Ucrania.

Leyenda o verdad, hay una frase que se atribuye a Putin durante el momento más grave de la crisis de Osetia del sur: «Voy a colgar a Saakashvilí por las bolas».

Hace dos años, cuando volvió a poner pie en Georgia fue detenido y encarcelado. Denunció que había sido víctima de un intento de envenenamiento y desde que está en encarcelado apenas pesa 60. Kilos.

Su madre denuncia que las condiciones en prisión son infrahumanas y apenas puede caminar, que sufre frecuentes vómitos después de ingerir alimentos y pierde el conocimiento.