Fundado en 1910
Pedro Sánchez, en un acto de la Presidencia española de la UE

Pedro Sánchez, en un acto de la Presidencia española de la UEEFE

Los países de la UE dan la espalda a España: las decisiones de Sánchez han perjudicado su reputación

Francia y Alemania favorecen a Polonia como tercer alíado principal, puesto que tradicionalmente había ocupado España

España se encuentra en una posición delicada en el escenario de la Unión Europea. Ha pasado de ser uno de sus países mejor valorados a un punto de interrogación tras los acuerdos de Pedro Sánchez con los separatistas catalanes, que ponen en duda su respeto al Estado de derecho.

La reciente preferencia de Francia y Alemania por Polonia como socio principal en la UE, en lugar de España, no ha hecho más que confirmar el impacto negativo de las decisiones del gobierno de Sánchez en la reputación de España en el bloque.

Stéphane Séjourné, el recién nombrado ministro francés de Asuntos Exteriores, puso de relieve la intención de Francia de fortalecer su posición en Europa a través de una cooperación más estrecha con Polonia y Alemania. Sus primeras visitas diplomáticas a Berlín y Varsovia subrayan un cambio en la dinámica de alianzas tradicionales de Francia, dejando a España en un papel menos prominente.

Esta decisión de Francia y Alemania se ve influenciada por varios factores, incluyendo la situación política en Italia y España, y la guerra en curso en Ucrania.

Todos saben que España, bajo el liderazgo del socialista Pedro Sánchez, enfrenta desafíos internos y equilibrios políticos delicados para mantenerse en el poder. Por otro lado, la situación en Ucrania ha llevado a Berlín y París a buscar aliados en el Este, especialmente entre los vecinos de Rusia y Ucrania, aumentando la importancia estratégica de Polonia.

En Varsovia, Séjourné destacó el regreso de Polonia a una posición más central en Europa. Esto se ve reflejado en el renovado interés por revitalizar el Triángulo de Weimar, una plataforma de cooperación entre Francia, Alemania y Polonia, creada originalmente en 1991. La próxima cumbre del Triángulo de Weimar se realizará en París, destacando el papel creciente de Polonia en la construcción europea.

Una cuestión de liderazgo

El cambio político en Polonia, con la llegada al poder del liberal Donald Tusk, ha contribuido significativamente a este cambio en las alianzas.

Tusk, conocido por sus posturas proeuropeas y su buena relación con líderes como Emmanuel Macron, ha prometido reparar las grietas en el Estado de derecho provocadas por el anterior gobierno del Partido Ley y Justicia (PiS). Este compromiso ha sido bien recibido por Francia, que ve en Polonia un aliado potencialmente más estable y alineado con sus intereses en la región.

Además, la importancia geopolítica de Polonia se ha visto acrecentada debido a su posición frente a la guerra en Ucrania. Tanto Francia como Alemania consideran crucial el papel de Polonia en el frente oriental, donde se enfrentan el autoritarismo ruso y la democracia ucraniana.

Y la postura firme de Polonia contra Moscú y su inversión significativa en defensa, incluyendo planes para construir un poderoso ejército y una segunda central nuclear, posiblemente con colaboración francesa, la convierten en un socio estratégico clave.

España, bajo la presidencia de Pedro Sánchez, está en el lado opuesto de la balanza. Pasó sus últimos meses a la cabeza del Consejo Europeo más preocupado por la política doméstica que por los asuntos de la Unión Europea.

Se retrasó en muchas de sus responsabilidades; un ejemplo sería su fracaso a la hora de liderar las negociaciones en torno a la reforma fiscal, que sólo se zanjó tras la intervención de los gobiernos de Francia y Alemania.

Está también el caso de las lenguas co-oficiales, cuando Sánchez trató de integrar el gallego, catalán y euskera en la lista de idiomas de la UE. Sometió la idea a debate y llegó incluso a proponer que España se haría cargo de los millonarios gastos, pero los demás países consideraron que el tema era un gasto de tiempo y medios ya que había asuntos mucho más importantes por debatir.

comentarios
tracking