La dictadura cubana condena a 15 años de cárcel a una joven por difundir «propaganda enemiga»

Mayelín Rodríguez Prado, una cubana de 23 años, recibió la condena más alta dictada hasta ahora contra los manifestantes enjuiciados por el régimen cubano tras las protestas de agosto 2022.

Rodríguez Prado, quien está recluida en el penal Granja Cinco de Cuba, fue acusada de los delitos de «propaganda enemiga de carácter continuado» y «sedición» tras grabar con su móvil y difundir en sus redes sociales la represión del régimen cubano.

La fiscalía cubana negó el maltrato físico de oficiales de la policía castrista contra una menor de edad publicado por Rodríguez Prado en sus redes sociales. «Dicen que eso fue mentira y que yo lo hice en ausencia de la madre y de la tía de esa niña. Su madre estaba presente ahí, el directo confirma que yo le pedí permiso», explicó en comunicación telefónica con el Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba.

Pese a su alta condena, Rodríguez Prado, también madre de una niña pequeña, contó a los relatores que se siente tranquila. «Los papeles dicen que no fue una coincidencia mi papel protagónico en los hechos... Estoy tranquila, esto no va a durar 15 años».

Más de una decena de manifestantes fueron condenados por las protestas en Camagüey y varios de ellos pidieron apoyo para que sus casos se conozcan.

«Necesitamos que se haga visible la situación que estamos viviendo nosotros y a lo que nos estamos enfrentando», comentó José Armando Torrente Muñoz, con sentencia de 14 años por los delitos de sedición, atentado y sabotaje.

La cifra de presos políticos no deja de crecer en la isla caribeña gobernada por el comunismo: 1.092 a principios de abril, según Prisoners Defenders.