Trump reaparece en la convención republicana convertido en un héroe tras el intento de magnicidio

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, llega este lunes a la Convención Nacional Republicana, en Milwaukee, convertido en un héroe. El intento fallido de magnicidio contra el magnate, este sábado, durante un mitin en Butler, Pensilvania, le sitúa entre sus seguidores como un superviviente político. Desde hoy y hasta el jueves, unas 50.000 personas se reunirán para encumbrar a Trump como el único y gran candidato del Partido Republicano para las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre, en las que se enfrentará a Joe Biden.

La imagen de Trump con el puño en alto, la cara ensangrentada y la bandera de Estados Unidos de fondo pasará a los anales de la historia del país norteamericano. Una fotografía que ya parece haber catapultado al republicano a la Casa Blanca, a falta de tres meses de los comicios. La Convención Nacional Republicana coronará a Trump, quien ha despejado toda clase de dudas sobre su presencia tras el atentado. En un mensaje en su red social Truth Social, el expresidente aseguró que no tiene «miedo» y confirmó su asistencia al evento republicano.

En Milwaukee ya estaba todo preparado para dar la bienvenida a uno de los mayores eventos del año, cuando el atentado contra Trump era retransmitido en directo en todos los canales de televisión del país. El expresidente que enseguida se percató de que «algo andaba mal», como él mismo relató, se resguardó detrás del atril. El atacante, que ha sido identificado por el FBI como Thomas Matthew Crooks, 20 años, disparó hasta en ocho ocasiones contra el presidente, al que acabó hiriendo en la oreja derecha.

«Me dispararon con una bala que atravesó la parte superior de mi oreja derecha. Supe de inmediato que algo andaba mal porque escuché un zumbido, disparos e inmediatamente sentí la bala atravesando la piel», explicó el magnate, horas después del atentado, en su primer mensaje en redes sociales. El atentado acabó con la muerte de un asistente y otros dos heridos graves. El francotirador, que se valió de un fusil semiautomático del tipo AR-15, fue abatido por el Servicio Secreto.

Trump decidió pasar el domingo descansando en la Torre Trump, donde llegó ya entrada la madrugada y tras haber sido dado de alta del hospital. Hasta una treintena de personas se concentraron a las puertas del rascacielos, en una vigilia espontánea, para mostrar su apoyo al expresidente. La expectación por la Convención Nacional Republicana es máxima. El equipo del candidato ya ha adelantado que se reforzará la seguridad para evitar que se repita un incidente como el de Pensilvania.

Trump llega a esta importante cita con el equipaje ligero. En el plano legal, aliviado tras el fallo del Tribunal Supremo que le concedió amplia inmunidad penal por los actos ejercidos mientras era presidente. En el plano político, el magnate, en un hábil movimiento, se desvinculó de un programa de Gobierno denominado como 'Proyecto 2025'. Esta polémica hoja de ruta, impulsada por la Fundación Heritage, proponía, entre otras medidas, desmantelar varias agencias del Gobierno federal y despedir a miles de funcionarios públicos.

«No sé nada sobre el 'Proyecto 2025'. No tengo ni idea de quién está detrás. No estoy de acuerdo con algunas de las cosas que dicen y algunas de las cosas que dicen son absolutamente ridículas y abismales», aseveró Trump. Durante esta semana se espera, además, que el republicano anuncie por fin a su candidato para la vicepresidencia. Los nombres que más han sonado hasta el momento son los de James David Vance y Marco Rubio, ambos senadores, y el del gobernador Doug Burgum. Sea como fuere, Trump llega a Milwaukee como un héroe entre los suyos.