López Obrador y Sheinbaum en la toma de posesión en la Cámara de los Diputados mexicana
Al igual que López Obrador, Sheinbaum Pardo tiene origen español, pero no lo quiere reconocer
Dos abuelos de AMLO eran cántabros y asturianos, mientras Sheinbaum tiene por lo menos un apellido español. Las múltiples conexiones patrias les delatan, pero continúan criticándonos
El expresidente de México, Andrés Manuel López Obrador (referido también por las siglas AMLO), jamás se ha atrevido a mentar sus múltiples nexos españoles. Lo cierto es que José Obrador, el abuelo de AMLO, dejó su natal Ampuero, en la Cantabria oriental (y donde nació en una casa cuartel de la Guardia Civil) para emprender un viaje en barco desde Santander con una mano delante, otra detrás y sin ticket de regreso.
Un periplo durante el que tuvo que esconderse dentro de un barril porque «llevaba documentación falsa». Cien años más tarde, su nieto se convertía en el presidente más votado de México mientras emitía improperios contra la Corona y la Conquista Española.
Para más inri, el abuelo de López Obrador se casó con Úrsula Gertrudis, añadiendo aún más genes españoles al ADN del mandatario mexicano: el padre de Úrsula y bisabuelo de AMLO, José González Viñas, era un emigrante asturiano del que solo se sabe que salió de España en el siglo XIX.
Claudia Sheinbaum se ha convertido en la primera mujer en presidir México y la primera judía en la nación hermana que cuenta con la segunda mayor población de católicos.
A Sheinbaum siempre le ha gustado ir de misteriosa, arrastrando un aura comunista. Presume de sus orígenes judíos procedentes, supuestamente, de Lituania y Bulgaria y otros países de Europa del Este.
Ni mentar a España, a la que solo se dirige mediante afrentas. Aunque, una sola vez se le escapó y delató sus «orígenes judíos sefardíes», lo que nos conecta directamente con su segundo apellido: Pardo. Apellido del que, casualmente, nunca se hace eco pese a ser tradición en México presentarse con el nombre y los dos apellidos.
Pardo es un apellido muy antiguo de origen judío sefardí, tal y como ratifica en sus orígenes la presidenta. Sin embargo, dudamos que confiese que procede de Sagunto, población a 30 minutos al norte de Valencia. Los miembros de la familia Pardo se han distinguido principalmente por ser oriundos de la región de Levante en el Mediterráneo.
Este apellido pertenece al pueblo judío que se estableció en la Península Ibérica y hoy en día se encuentran en países como México.
A la mandataria no le gustará saber que el capitán Juan Pardo fue un explorador y conquistador español de origen judío, que estuvo activo en la segunda mitad del siglo XVI. Durante su primera expedición, Pardo entabló buenas relaciones con las tribus indias y buscó principalmente alimentos para la misión jesuita de Santa Elena.
Las conexiones de Sheinbaum con España son múltiples. Hoy mismo, los tabloides mexicanos hablaban sobre el origen de Jesús María Tarriba, el marido de la política que ya es el primer caballero de México. Tarriba estuvo previamente casado con Martha Tello, con la que tuvo una hija, llamada Fernanda. Ambas residen en España. Tarriba vivió, también, 18 años en nuestro país como directivo del Banco Santander.
La única hija biológica de Sheinbaum estudió en la Universidad de Barcelona. Otro hijo de su esposo, que trata a Sheinbaum como madre, lo hizo en Valencia. La mandataria posee un suma y sigue de agravios contra España, pero, son muchas más las conexiones que la unen con nuestra nación.
