János Bóka, ministro húngaros de Asuntos Europeos
Hungría pide a la Comisión Europea quedar exenta de las normas de la UE sobre inmigración
La aprobación de una exención de este tipo es poco probable, ya que requiere del consenso de los 27 Estados miembros de la Unión Europea
Hungría ha solicitado formalmente a la Comisión Europea quedar exenta de la legislación sobre migración de la Unión Europea (UE), anunció este lunes el ministro de Asuntos Europeos del país, János Bóka.
«Hungría se ha comprometido a adoptar medidas firmes para proteger sus fronteras y frenar la migración ilegal, que supone una amenaza para la seguridad nacional», indicó el ministro húngaro en la red social X.
A juicio de Bóka, «restablecer un control nacional más firme sobre la migración es ahora la única opción para lograr ese objetivo».
En una carta dirigida a la comisaria de Interior, Ylva Johansson, el ministro húngaro explicó que, si se realiza una modificación de los tratados de la UE que permita tales excepciones, Hungría seguiría el ejemplo de Países Bajos e iniciaría los procedimientos necesarios para aplicarla.
Bóka subrayó que su país seguirá comprometido con el espacio Schengen de libre movimiento.
La petición húngara se produce después de que Países Bajos solicitara también desvincularse de las normas europeas, algo para lo que la Comisión dijo que se requieren cambios legislativos a escala comunitaria.
Sin embargo, la aprobación de una exención de este tipo es poco probable, ya que requiere del consenso de los 27 Estados miembros de la UE.
Este es el último desencuentro sobre inmigración ilegal entre Hungría y la Comisión Europea, que ha recurrido a la Justicia para dirimir las diferencias.
El pasado verano, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) impuso a Hungría una multa de 200 millones de euros, además de una sanción de un millón de euros diarios por no garantizar el acceso efectivo de los solicitantes de asilo a los procedimientos legales.
Hasta la fecha, Hungría se ha negado a pagar las multas.
Como respuesta, la Comisión Europea ha anunciado su intención de descontar las sanciones de los fondos europeos destinados a Hungría, que ya se encuentran parcialmente congelados desde 2022 debido a «preocupaciones» sobre presunta corrupción y el irrespeto al Estado de derecho.
