
Kim Jong-un visitando el comando del 2º Cuerpo del Ejército Popular de Corea del Norte
Seúl denuncia que Corea del Norte ha enviado otros 3.000 militares a Rusia
Pionyang ha suministrado a Moscú armamento y municiones, incluyendo más de 220 piezas de artillería como misiles balísticos de corto alcance (SRBM), cañones autopropulsados de 170 milímetros y lanzacohetes múltiples de 240 milímetros
Las Fuerzas Armadas de Corea del Sur cifraron este jueves en 3.000 los militares norcoreanos adicionales enviados desde principios de año a Rusia, en el marco de la invasión de Ucrania, a medida que Pyongyang cosecha avances en el desarrollo de sus capacidades armamentísticas.
«De los aproximadamente 11.000 soldados norcoreanos enviados a Rusia, ha habido 4.000 bajas, y parece que se han enviado además unos 3.000 o más en enero y febrero», informó el Estado Mayor Conjunto (JCS) de Corea del Sur, según recoge la agencia de noticias Yonhap.
Además Pionyang ha suministrado a Moscú armamento y municiones, incluyendo más de 220 piezas de artillería como misiles balísticos de corto alcance (SRBM), cañones autopropulsados de 170 milímetros y lanzacohetes múltiples de 240 milímetros.
En paralelo, el Norte mantiene diversas movilizaciones internas. A inicios de marzo se reanudaron los trabajos en la línea del frente, donde se han desplegado entre decenas y cientos de personas para reforzar vallas y otras estructuras en áreas cercanas a la Línea de Demarcación Militar (MDL).Según el JCS, hace unos días se produjo una explosión de mina en la zona, el primer caso del año, con múltiples víctimas. Las imágenes difundidas por el Ejército surcoreano muestran la evacuación de heridos en camillas tras el accidente.
Asimismo, se han completado las labores de desmantelamiento de 11 torres de transmisión en la línea Gyeongui, uno de los símbolos clave de cooperación intercoreana que atraviesa la Zona Desmilitarizada (DMZ).
Sin embargo, Corea del Norte no ha retirado la primera torre al norte de la MDL, donde instaló en febrero una cámara de vigilancia (CCTV). El JCS dijo que, aunque no supone una amenaza directa, la cámara podría comprometer la discreción de las operaciones surcoreanas, por lo que se mantiene un estado de alerta.
El informe indica que no se han detectado señales de un lanzamiento inminente del satélite de reconocimiento norcoreano en desarrollo, pese al apoyo técnico ruso tras el fallo de 2023. También advierte de posibles provocaciones tácticas o estratégicas tras la conclusión, el 21 de marzo, de los ejercicios Freedom Shield, realizados en conjunto por Seúl y Washington.
Kim Jong-un supervisó esta semana pruebas de drones suicidas con inteligencia artificial y la presentación de un nuevo avión de alerta temprana, lo que evidencia avances tecnológicos aplicados a la guerra moderna.
Estas iniciativas se producen en un contexto de creciente acercamiento con Moscú, reforzado por la reciente visita del secretario del Consejo de Seguridad ruso, Serguéi Shoigú, la semana pasada, y por informes en marzo sobre el entrenamiento de tropas norcoreanas en territorio ruso antes de su despliegue en combate.