Los patinetes eléctricos se han convertido en una alternativa de movilidad cada vez más presente

Los patinetes eléctricos se han convertido en una alternativa de movilidad cada vez más presente

Seguridad vial

Consejos de seguridad para moverte en patinete eléctrico

Este tipo de transporte supone un peligro para el conductor y para los que le rodean en su marcha

Tan solo hace falta echar un vistazo a nuestro alrededor en las calles de cualquier ciudad para ver que los patinetes eléctricos se han convertido en una alternativa de movilidad cada vez más presente, superando con creces el más de un millón de usuarios en España.

Son cómodos, rápidos, fáciles de utilizar y de transportar, además de eficientes (no contaminan). Es un vehículo práctico y divertido, pero no hay que olvidar que no es un juguete.

Desde Segway-Ninebot, el fabricante de soluciones de movilidad eléctrica, recuerdan que «al igual que con cualquier otro medio de transporte, existen peligros si no se conducen tomando las precauciones adecuadas».

Consejos de seguridad

  • Obedece la normativa: los patinetes eléctricos están obligados a cumplir con la normativa de cada ciudad, como cualquier otro vehículo. Esto incluye hacer caso de todas las señales de tráfico y respetar la velocidad máxima permitida por ley, que es de 25 km/hora.
  • Ley de Tráfico: la norma prohíbe circular por aceras, áreas peatonales, autopistas y autovías. Usa los carriles habilitados para los vehículos de movilidad personal (VMP).
  • Edad mínima: no se puede conducir un patinete eléctrico sin tener la edad mínima, que varía según la ciudad. Ejemplos: 14 años en Pamplona, 15 años en Sevilla, y 16 años en Barcelona, Madrid, o Valencia.

  • Alcohol y drogas: está prohibido circular con patinete tras consumir alcohol o drogas, lo que puede suponer la inmovilización del vehículo y una multa de entre 500 y 1.000 euros.

  • No te olvides de usar casco: el uso de un casco homologado es la primera acción que debe llevar a cabo una persona que quiera conducir un patinete eléctrico. Protegerá al usuario de una lesión grave. De hecho, las lesiones más peligrosas en un accidente con patinete eléctrico son las relacionadas con el cráneo.
  • Tipos de casco: los cascos actuales son ligeros, cómodos y con un diseño muy ergonómico, no hay excusa para proteger nuestra cabeza. Este complemento se puede acompañar de guantes, rodilleras y coderas para viajar completamente protegidos.

  • El móvil, guardado. Las distracciones son una de las principales causas de accidente en cualquier vehículo y los VMP no son una excepción. Mirar el móvil o escribir mensajes, además de ser peligroso, puede suponer una sanción en función de la normativa de cada ayuntamiento. Cuando sea necesario consultarlo, desplázate a una zona segura para comprobar llamadas y mensajes.

  • Escuchar música: aunque a todos nos guste escuchar música mientras conducimos, está prohibido el uso de auriculares mientras se conduce un patinete eléctrico.

  • Manillar: el manillar con dos mangos no es para hacer más atractivo el patinete, sino que hay un propósito específico detrás. Tener las dos manos en el manillar, hace que sea mucho más fácil mantener el control del patinete si ocurre algo inesperado.

  • Viaja solo: el patinete está hecho y pensado para que sea un solo usuario el que disfrute de su servicio. Son unipersonales, por lo que llevar a otra persona de acompañante puede conllevar sanciones por parte de las autoridades. En este sentido, tampoco está permitido instalar un asiento.

  • Elementos reflectantes: tanto si se conduce de día como de noche, es recomendable llevar elementos reflectantes y las luces del vehículo encendidas, tanto para ver el camino si se hace de noche, como para ser visto por los que circulan por la vía pública.

  • Revisiones del vehículo: en muchas ocasiones los accidentes están relacionados con fallos mecánicos o por piezas del patinete. Se debe hacer un buen mantenimiento y con la revisión de frenos, neumáticos y batería.

  • Mal tiempo: al igual que los coches o las motos, los patinetes también son vulnerables a las malas condiciones meteorológicas y suelos resbaladizos.
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