Las ciudades en las que los acuerdos entre PP y Vox podrían desactivar las Zonas de Bajas Emisiones

La entrada de Vox en los ayuntamientos de más de 140 municipios españoles, de los cuales una veintena tienen más de 50.000 habitantes, afecta directamente a aspectos tan importantes para el día a día como la movilidad y la circulación de sus residentes, especialmente ahora que se han activados las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) en muchos de ellos.

La DGT delega en los ayuntamientos la organización de los aspectos más importantes relativos a la circulación como son las Zonas de Bajas Emisiones, cuya aplicación directa y articulado corre por cuenta de las corporaciones locales.

Camino de las cero emisiones

De acuerdo con la legislación europea incluida en el plan de reducción de emisiones Fit for 55 a lo largo de 2023 las ciudades españolas de más de 50.000 habitantes deberían poner en funcionamiento las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).

Algo que está ocurriendo de forma desacompasada y desigual. El objetivo final del plan es reducir las emisiones europeas de carbono un 55 % de cara a 2030, y alcanzar la neutralidad de emisiones en 2050.

El marco legal básico para la aplicación de las ZBE parte de la DGT, para lo que creó el sistema de etiquetas en función de las emisiones de los automóviles y estableció los plazos y las fechas en las que las ciudades deberían empezar a poner limitaciones a la circulación de los automóviles.

El Gobierno, un espectador

La acción del Gobierno central se limitará a valorar cada cuatro años la evolución de la contaminación ambiental en los municipios para dictaminar si las ZBE de una determinada ciudad funcionan o no, y en función de de estos datos pedir cambios.

El problema real es que de la buena marcha de estas emisiones dependen millones de euros en subvenciones de la Unión Europea que ya han empezado a recibir los ayuntamientos.

Esto ha permitido múltiples interpretaciones por parte de los ayuntamientos, desde ciudades en las que las limitaciones se reducen a prohibir circular a los coches sin etiqueta por la noche o limitar su número de entradas semanales, hasta otras que valoran un posible peaje o se ha prohibido directamente la circulación de coches sin etiqueta.

Más de 50.000 habitantes

Aunque a día de hoy las 149 ciudades españolas de más de 50.000 habitantes debería contar con ZBE activas, la realidad es que un retraso en la aprobación de la normativa por parte del Gobierno, no fue aprobada hasta diciembre de 2022, lo ha hecho literalmente imposible.

Las elecciones municipales de mayo de este año trajeron un cambio de partido a centenares de municipios españoles, lo que ha llegado acompañado de cambios en aspectos tan importantes como la movilidad y las ZBE.

Hay que tener en cuenta que Vox hizo de las limitaciones a la circulación uno de sus grandes ejes electorales, y ahora está decidido a cumplir lo prometido cambiando las ZBE en las corporaciones en las que mantiene un un pacto de gobierno con el PP, en concreto se trata de unos 135 ayuntamientos, aunque hay que contar con que la gran mayoría de estos no están obligados a contar con Zonas de Bajas Emisiones.

Gijón marcó el camino

Gijón fue la primera ciudad en la que el apoyo de Vox y PP para la llegada a la alcaldía de Carmen Moriyón, de Foro Asturias, ha permitido que los coches sin etiqueta vuelvan a circular por la ciudad. No es que se hayan eliminado las ZBE, sino que se cambiarán aspectos de su aplicación, lo que las hará mucho más laxas. En este caso una resolución judicial obligó a desactivarlas recientemente, situación en la que se encuentran hasta que el nuevo equipo municipal las rediseñe.

Numerosas capitales de provincia y ciudades de más de 50.000 habitantes pueden verse afectadas por situaciones similares. A día de hoy estos cambios afectan ya a Valladolid, Castellón, Elche, Murcia, Burgos, Toledo, Ciudad Real, Guadalajara, Huelva, Orihuela, Talavera de la Reina, Valencia, Móstoles y Alcalá de Henares.

• Valladolid: El ayuntamiento ha abierto una consulta pública con la intención de que sean los ciudadanos quien diseñen el funcionamiento de las ZBE, reduciendo los 3,1 kilómetros cuadrados previstos inicialmente por la anterior corporación.

• Castellón: la alcaldesa Begoña Carrasco ha eliminado la ecoconcejalía y trabajan ya en una completa remodelación de las ZBE.

• Elche: se contemplan unas ZBE light que permitirá circular por los puentes y no exigirá etiquetas para circular.

• Murcia: Vox ya ha exigido a Ballesta, del PP, que gobierna en solitario, que no limite la circulación por las grandes arterias de la ciudad, tal y como estaba previsto inicialmente.

• Burgos: la concejalía de movilidad está en manos del PP, pero ya en el pacto de Gobierno firmado por PP y Vox se recoge generar nuevos espacios para el peatón y aparcamientos sin penalizar la circulación vial. Junto con otro punto más concreto, la aprobación de una ordenanza municipal que, cumpliendo la normativa vigente, reduzca al mínimo legal la ZBE, sin generar efectos negativos ni en la movilidad ni en la actividad comercial de la ciudad.

• Toledo: en la ciudad de las tres culturas, la alcaldesa Begoña Carrasco anunció modificaciones de calado en el proyecto de las ZBE que contemplaba una segunda fase de peatonalización de gran parte de la ciudad. En concreto se elimina el proyecto de peatonalizar 745.000 metros cuadrados, y el plan se mantiene en la situación actual, que afecta al centro de la ciudad. El PP se comprometió a que las cámaras de tráfico centrales de la ciudad dejaran de multar.

• Ciudad Real: el equipo municipal del PP ha confirmado que va a realizar un estudio sobre el impacto real e las ZBE sobre el comercio local, y en función del mismo tomará decisiones sobre su funcionamiento.

• Guadalajara: la alcaldesa del PP propone replantear los aparcamientos disuasorios y en general la aplicación de las zonas de bajas emisiones que dejó diseñadas su antecesor en el puesto, de cara a fomentar el comercio local, frente a lo cual el PSOE, en la oposición, ha pedido públicamente que se mantenga el plan de ZBE ya diseñado.

• Huelva: el nuevo ejecutivo de la ciudad quiere escuchar a las partes interesadas en la aplicación de las ZBE, fundamentalmente comerciantes, ciudadanos, profesionales del sector del transporte antes de tomar una decisión respecto al Plan de Movilidad Urbana Sostenible diseñado por la anterior corporación, que fue aprobado el año pasado con el único voto en contra de Vox.

• Orihuela: a día de hoy no hay novedades, pero el campaña el candidato de Vox afirmó estar en contra de su aplicación a falta de un estudio pormenorizado, mientras que el del PP se comprometió a un replanteamiento de toda la ciudad, con nuevas zonas peatonalizadas que hicieran de Orihuela un lugar más ecológico.

• Talavera de la Reina: su alcalde del PP José Julián Gregorio ha anunciado la petición de un estudio de impacto económica y ambiental antes del diseño y la aplicación definitiva de las ZBE.

• Valencia: la alcaldesa María José Catalá reconoce a Vox como socio preferente de Gobierno, que en su momento ya anunció su intención de no aplicar las ZBE en a ciudad del Turia. A día de hoy Catalá ha desconectado las cámaras de control del Área de Prioridad Residencial hasta el completo diseño del plan de movilidad.

• Móstoles: Es una de las ciudades madrileñas en las que el equipo municipal presidido por Manuel Bautista trabaja ya en un rediseño de las ZBE dejadas por el PSOE.

• Alcalá de Henares: la situación es similar a Mostoles, en este caso Judith Piquet es alcaldesa gracias a Vox y trabaja ya en una adaptación de la Zona de Bajas Emisiones.