Práctico
Los alumnos no dan crédito: la recomendación de un profesor de autoescuela si un coche se nos pega mucho
Conducir para aprobar el examen no es lo mismo que conducir en el día a día, por ello en ocasiones conviene saber trucos para nuestro día a día al volante
Los profesores de autoescuela son considerados una referencia en materia de seguridad vial, hace ya tiempo que se trata de una profesión muy especializada y cuentan con una formación exclusiva para ello.
Al fin y al cabo de ellos depende la seguridad en la carretera de los miles de alumnos que preparan cada año. Es cierto que en ocasiones la formación que imparten va muy enfocada a superar el examen, pero ellos son la clave en el primer contacto con un automóvil de millones de conductores noveles.
No respetan la distancia
Sus conocimientos en materia de seguridad vial roza la excelencia, aunque también conocen técnicas no tan ortodoxas pero que en un momento dado pueden ayudarnos a salir de un apuro, tal y como ocurre en el caso que vamos a relatar.
Decenas de consejos con los que pueden ayudarnos para aparcar en un periquete o para quitarnos de encima la presión de un coche acosador.
Uno de los gestos más habituales que van a sufrir los nuevos conductores en la carretera es el acoso al que algunos conductores someten a otros si consideran que van muy despacio, al no respetar la distancia de seguridad.
Una infracción habitual
Esta conducta supone un riesgo doble, por un lado si el conductor que va delante se ve obligado a dar un frenazo por una emergencia es muy probable que el coche acosador se les suba encima, lo que puede suponer el inicio de un choque en cadena de los vehículos que van detrás.
En este caso contrasta la diferencia entre el consejo que da una profesora de autoescuela británica y uno español.
British teacher
Anni Winterburn aboga por aumentar la distancia de seguridad con el vehículo que tenemos delante si vemos que el coche que nos sigue se nos acerca demasiado. De esta manera podemos anticipar nuestras reacciones y haremos frenadas más seguras para que el coche que nos sigue no se nos suba encima.
En el caso del profesor español la medida es mucho más radical, en este caso Raúl Ros demuestra a su alumno cómo activando el agua de los limpiaparabrisas delanteros le salpicará agua al coche de atrás, lo que servirá como toque de atención para incrementar la distancia de seguridad, pues nos está incomodando.