Abascal, Olona, Borrás y Nogueras

Hay muchos políticos cuyos discursos no me convencen. Un ejemplo: Abascal hablando de su moción de censura. Hay tres mujeres políticas que nunca me convencieron, que nunca me gustaron: Macarena Olona, Laura Borràs, y Miriam Nogueras.

La primera ya ha sido castigada, la segunda seguramente la castigarán, y la tercera sigue con sus desprecios.

Antes, cuando creía que «Dios premia a los buenos, y castiga a los malos», habría acabado pensando que yo estaba equivocado. Que había valorado equivocadamente a la diputada independentista.

Ahora no sé qué pensar. ¿Por qué no la expulsan por su último insulto: apartar de sí misma, la bandera española, en la sala de prensa del Congreso? ¿Por qué sigue cobrando del presupuesto español? ¿Por qué sigue subida al tren independentista, cuando casi todos los intelectuales se han apeado?

Volviendo a las castigadas, seré sincero y diré por qué no me convencen. La primera por su brutalidad. La segunda por su arribismo.

De la primera recuerdo sus ataques a la ministra de Igualdad últimamente y al presidente del Gobierno, durante la pandemia. De la segunda, el artículo que escribió el profesor Llovet sobre ella.