¿Se puede morir por tus ideas?

Como te preparas para vivir o morir, filosofar no solo es pensar, hablar o escribir, sino también arriesgar en cómo aprender a vivir y morir.

Para algunos filósofos, saber morir es mucho más importante que saber vivir. No solo consiste en estudiar el mundo, sino cómo estudiarse a sí mismo sobre todo cuando vives con unas ideas fijas.

Pero el arte de vivir no es cambiar el mundo, sino a uno mismo para el bien común y una mejora de la vida tanto material como espiritual. Estamos vivos mientras estamos inmaduros, nosotros no somos nosotros, pensamos como se piensa, comemos como se puede, vivimos como se vive. Estamos sujetos al dominio de los otros. Y, ¿quién son los otros? Personas que no tienen esenia, ni moral, ni principios, intrusos en nuestra existencia. Llamados revolucionarios que actúan como un engaño cuyas mentiras condicionan el género humano.

Una corriente filosófica considera que la bondad de una acción solo puede medirse con la siguiente pregunta. ¿Qué acto produce la mayor utilidad posible para el mayor número de personas? No hay contestación si antes no se reflexiona sobre dos conceptos. ¿Cómo se definen la utilidad y la persona? Un filósofo equipara la utilidad con el interés y define a la persona como un ser racional y autoconsciente, analizando el argumento provida. Morir por tus ideas fijas, está mal, matar a un ser humano inocente es un crimen. ¿El feto es un ser humano inocente? Sí, por lo tanto, no es un crimen matar a un feto humano. Con esta premisa, cualquiera que tenga sentido común se da cuenta de que un feto humano es el principio de una persona.

Sin embargo, para algunos la ideología fija les obliga a negar la mayor: matar a un ser humano inocente no está mal, siempre y cuando el interés del agredido por vivir arroje menos provecho que el interés del agresor por matarlo. Y como los niños no razonan, no pueden tener intereses. Y las personas sin moral, sí tienen muchos intereses en matar…