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Cartas al director

Al Pacino y otros actores

Don Luis Ventoso publicaba el día de ayer un magnífico artículo, como todos los suyos, en el que hacía una serie de observaciones sobre el hecho de que el actor Al Pacino hubiese tenido un hijo a los 84 años, en el cual encontré una enumeración de actores de cine que me resultó chocante.

Mete en el mismo saco a Fernando Fernán Gómez y a Bogart, Toni Servillo, Vittorio Gassman, Ingrid Bergman y otros. Y a mí me pareció como una especie de blasfemia cinematográfica. Fernando FG es un actor para andar por casa, incluso no resiste comparación con actores españoles de su época, como José Bódalo. Es un actor amanerado que siempre hacía el mismo papel, con distinto atuendo. No hacía cine hacía teatro fotografiado. Y su fama es debida, en gran parte, a razones no propiamente cinematográficas. Pienso que anteponerlo a Francisco Rabal, por ejemplo, es absurdo, éste comunicaba a sus personajes un dramatismo y una verosimilitud extraordinarios, son memorables sus impresionantes interpretaciones del torerillo aterrorizado en Los clarines del miedo (Antonio Román) o en otro papel, completamente distinto, en La guerra de Dios (Rafael Gil).

Vittorio Gassman en Perfume de mujer (Dino Risi), calcada por Martín Brest con el nombre de Esencia de mujer y protagonizada, muy bien, por Al Pacino precisamente. Toni Servillo en La gran belleza (Paolo Sorrentino) o la famosísima Casablanca (Michael Curtiz) de Humphrey Bogart e Ingrid Bergman. Este es un mundo en el que Fernando FG está de más.

César Colis Herce

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