El efímero secretario de Estado de Comunicación va a tener que dar explicaciones a la UCO de sus conversaciones telefónicas con dirigentes socialistas en torno a los documentos filtrados sobre la negociación entre Hacienda y el novio de Isabel Díaz Ayuso. El efímero paso por la secretaría de Estado -más efímero que el de Maxim Huertas por el Ministerio de Cultura- va a convertirse en una pesadilla.
El presidente cumplió con su deber de dirigirse a las tropas españolas desplegadas por el mundo. Son unos compatriotas que merecen la mayor de las admiraciones. Pero su puesta en escena resultó un poco desconcertante. Un mapamundi con el despliegue español. Y en ese escenario, la cosa tampoco es para tanto. Tal vez quiso dar impresión de potencia global, pero más bien parecía una puesta en escena de Tintín o del malo de la última película de James Bond.
El presidente de Telefónica ha dado un buen ejemplo y ha ampliado su inversión en la compañía que preside. No puede haber mejor señal para el accionista. Porque no es ya cuestión de no vender, es incrementar tu riesgo. Y la exposición de Álvarez-Pallete en su compañía, en la que acaba de invertir 400.000 euros ya era muy alta. Ahora suma 23 millones.
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