El truco para hacer que los plátanos maduren rápido en el frutero
Las frutas climatéricas terminan de madurar después de haber sido arrancadas del árbol
El plátano es una de las frutas más populares de textura agradable y fácil de pelar pero además, es fuente de fibra, potasio, vitamina B6 e inulina y en su composición destaca su riqueza en hidratos de carbono. En el plátano verde el hidrato de carbono mayoritario es el almidón, pero a medida que madura y su piel se vuelve amarilla, este almidón se va convirtiendo en azúcares sencillos como sacarosa, glucosa y fructosa.
El plátano es una fruta climatéricas como el aguacate, la manzana, la pera o el tomate esto es, que terminan de madurar después de haber sido arrancadas del árbol.
Mario Sánchez, autor del blog SefiFood analiza en su libro A tomate pocho no le hinques el diente (Ed. Plataforma Editorial) por qué las frutas maduran de forma diferente y cómo hacer para que unas ayuden a otras a madurar en el frutero.
En el libro, el experto explica que a algunas frutas les cuesta madurar más que a otras, lo que tiene mucho que ver con la producción de etileno: «Esta hormona que aparece en forma de gas es la culpable de que algunas frutas y vegetales continúen madurando después de su recolección del árbol, y es lo que explica que algunas se recojan cuando aún están verdes, algo que, aunque parezca contraproducente no lo es en absoluto».
Alterar la maduración
Mario Sánchez continúa explicando que las frutas climatéricas son capaces de alterar los procesos de maduración de otros vegetales, que no tienen suficiente actividad de etileno. Con las frutas no climatéricas ocurre exactamente lo contrario: una vez arrancadas del árbol la maduración se corta lo que le sucede a las naranjas, los limones y los cítricos en general, así como a las frambuesas, las uvas, las fresas, las cerezas o la piña.
Si se almacenan las frutas no climatéricas junto a las que si lo son es posible jugar con la maduración a nuestro antojo
«Si compramos plátanos que aún están muy verdes y queremos que maduren rápidamente, podemos colocarlos al lado de los aguacates o al revés, ya que su proximidad acelerará los procesos de maduración y hará que el plátano esté a gusto del comensal».
Frigo si o frigo no
Para ralentizar el proceso de maduración de los plátanos, peras o tomates se pueden almacenar en el frigorífico, ya que el frío frena la producción de etileno, «aunque debemos tener en cuenta que a nivel organoléptico, será menos recomendable y la fruta perderá sabor de hecho seguro que alguna vez has notado que al guardar los tomates o los plátanos en el frigorífico no saben igual la recomendación general, pues es que las frutas climatéricas se guarden en el frutero a temperatura ambiente y no en el frigorífico», concluye Mario Sánchez.