Marcos Llorente y su peligrosa apuesta por lo natural: de la dieta del paleolítico al bronceado sin protección

El futbolista del Atlético de Madrid, Marcos Llorente, a pesar de no ser uno de los elegidos para representar a España en la Eurocopa, no deja de copar titulares por cuestiones ajenas a lo deportivo. Hace unos días, durante sus vacaciones en Hawái, el deportista caldeaba las redes sociales al comentar en Instagram que tomaba el sol de 10 a 14 h sin protección ni gafas de sol.

Las críticas no se hicieron esperar y entre los comentarios de sus seguidores podía leerse: «He pasado por un melanoma. Deberías tener más cuidado con lo que dices y lo que promueves» y otro añadía: «¿Cómo se te ocurre decir en redes sociales que se puede tomar el sol de 12 a 14 horas sin crema solar y sin gafas? Eso lumbreras, díselo a las más de 1.000 personas que fallecen al año por melanomas».

Ante estos comentarios, él replicaba: «Yo sí puedo, tú no porque lo haces todo mal. Por eso digo que el problema no es el sol, somos nosotros. No culpéis al sol». En otro post aclaraba: «En ningún momento he dicho que no exista el melanoma, ni soy negacionista del melanoma. Ni soy irresponsable ni falto al respeto a los que lo han sufrido» y añadía: «Opino que el sol no es el culpable de las enfermedades».

Opinión de los dermatólogos

La dermatóloga del Grupo de Dermatología Estética y Terapéutica (Gedet) de la AEDV, la doctora Inés Escandell, explicaba los riesgos de tomar el sol sin protección solar: «Cuando nos exponemos a la radiación ultravioleta se producen una serie de respuestas en nuestra piel: inflamación, engrosamiento de la piel y se produce más melanina (y esto hace que nos pongamos morenos). Cuando hay más melanina en nuestra piel, esta nos aporta cierta protección a las células, pero para que se produzca el aumento de melanina nos hemos tenido que exponer a la radiación UVB, que es la más dañina para ellas, y esta radiación necesariamente les habrá producido un daño».

La doctora Escandell añadía: «La exposición gradual sí va a favorecer la síntesis de melanina (nos pondremos morenos) y eso genera cierta protección a nuestra piel para las quemaduras o el daño agudo, pero no elimina el daño a largo plazo de sufrir cáncer cutáneo y por supuesto, fotoenvejecimiento».

Dieta del paleolítico

Respecto a su alimentación, el futbolista explicaba en una entrevista en el programa El Larguero de la Cadena SER el pasado mes de abril, que seguía la conocida como dieta paleo: «Con la dieta del paleolítico iré al 100 %. Es un estilo de vida y una forma de vivir. Con eso viviré y con eso moriré» y añadía: «Lo hago por salud, y no por el fútbol. Tengo claro que cuando acabe mi carrera, seguiré cuidándome igual o más que ahora».

La dieta paleo o paleolítica tiene como propósito regresar a un modo de alimentación similar al de los primeros humanos, basándose en alimentos similares a los que se podrían haber consumido durante la era Paleolítica, que data de hace aproximadamente 2,5 millones a 10.000 años.

Se caracteriza por incluir pescado –sobre todo aquellos con alto contenido de ácidos grasos Omega-3, como el salmón, la caballa y el atún albacora–, carnes magras –especialmente de animales alimentados con pastura o de animales de caza–, frutas, verduras, frutos secos, semillas, aceites, especias, huevos y hierbas aromáticas.

Qué no comer en la dieta paleo

El consumo de productos lácteos, legumbres y granos está limitado, ya que estos se volvieron comunes cuando surgió la agricultura, hace unos 10.000 años y por supuesto no se incluyen ningún alimento procesado. Además, también estarían prohibidos los refrescos, azúcar, sal o los cereales, como el trigo, la avena y la cebada.