Medio Ambiente
Matemáticos y ecologistas cuestionan el cambio climático
El estudio publicado en la revista 'Science' asegura que la Tierra es más resistente de lo que se pensaba y ponen en duda el concepto de puntos de inflexión
La Tierra es mucho más resistente de lo que se pensaba y el concepto de puntos de inflexión es demasiado simple, en relación a si el cambio climático en curso puede ser revertido a tiempo, según desprenden los resultados del artículo publicado en Science.
Es la conclusión de un equipo internacional de ecologistas y matemáticos, que ha estudiado patrones espaciales como señales de alerta temprana de puntos de inflexión del cambio climático.
Señalan que a menudo se publican advertencias de que el cambio climático puede provocar puntos de inflexión, es decir, situaciones irreversibles en las que la sabana puede convertirse rápidamente en desierto, o la corriente cálida del golfo puede dejar de fluir. Estas advertencias suelen referirse a patrones espaciales como señales de alerta temprana de puntos de inflexión.
Ahora los investigadores precisan que es cierto que «hay que hacer todo lo que podamos para detener el cambio climático», afirman los autores en total acuerdo con el reciente informe del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), pero precisan que el concepto de puntos de inflexión es demasiado simple.
El artículo se basa en años de colaboración entre diversos institutos de investigación de los Países Bajos y en otros países, especialmente entre la Universidad de Utrecht y la de Leiden. Los investigadores abordaron la idea de un punto de inflexión dentro de un contexto espacial.
«La formación de patrones espaciales en los ecosistemas, como la formación espontánea de patrones complejos de vegetación, suele explicarse como una señal de alerta temprana de una transición crítica, explica en un comunicado el autor principal, Max Rietkerk, ecólogo afiliado a la Universidad de Utrecht. Pero estos patrones parecen en realidad permitir a los ecosistemas eludir esos puntos de inflexión». Estas conclusiones se basan en análisis matemáticos de modelos espaciales y en nuevas observaciones de ecosistemas del mundo real.
Los patrones que surgen espontáneamente en la naturaleza suelen denominarse patrones de Turing, en honor al célebre matemático británico Alan Turing, que en 1952 describió cómo los patrones de la naturaleza, como las rayas del pelaje de los animales, pueden desarrollarse a partir de una posición inicial homogénea.
Finalmente concluye el estudio que el mecanismo de formación de patrones de Turing sigue siendo indiscutible. Pero el hecho de que se forme un patrón en algún lugar no significa necesariamente que el equilibrio se altere más allá de un punto de inflexión.