Entrevista a Mercedes Cruzado, ganadera y portavoz de COAG Asturias
La gestión del lobo enfurece a los ganaderos: «Los diputados socialistas por Asturias son unos traidores»
Los ánimos siguen caldeados entre los ganaderos de los territorios afectados por la presencia del lobo. En los últimos años han aumentado los ataques de este animal al ganado y los profesionales del sector primario urgen soluciones ante la pérdida de cabezas y el acercamiento de lobos a los humanos. La principal reclamación, sacar al lobo del listado de especies protegidas (Lespre), algo que el Partido Popular llevó esta semana al Congreso en forma de proposición de ley para modificar el Real Decreto que lo regula.
Una iniciativa que contó con los votos a favor de PP, Vox, Junts y PNV, pero con la oposición del PSOE y de Sumar. Esto ha elevado el enfado de los ganaderos, especialmente de los asturianos, y es que los socialistas del Principado, que gobiernan en la región, dicen apoyar las reclamaciones de estos profesionales, llegando incluso a protagonizar enfrentamientos entre el Gobierno autonómico y el central, algo que no se plasma luego en lo que votan los diputados socialistas en Madrid.
El Debate habla con Mercedes Cruzado, ganadera y secretaria de COAG Asturias, para que pueda relatar de primera mano la situación que vive la comunidad. Cruzado, que fue la primera mujer en presidir un sindicato agrario en España en 2009, es ahora una de las voces más críticas contra la inclusión del lobo en el Lespre.
–¿Cuál es la situación actual del lobo en España y, en concreto en Asturias, que es una de las comunidades más afectadas?
–Son una plaga y están aumentando. Ya no hay en Asturias capacidad para que se instalen más manadas. Eso no quiere decir que no sigan aumentando los lobos, sino que están por ahí desperdigados, sueltos, aunque los echen de las manadas. Ellos siguen deambulando por el territorio y son los que seguramente se están acercando a las cuadras, a los pueblos, a las casas, que incluso ya ponen en aprietos a alguna persona, como pasó con un chico que tuvo que subirse a un árbol. Estos ejemplares que están fuera de la manada son incluso los más peligrosos, porque van directamente cerca de las casas donde está el ganado. Ya están en los prados alrededor de las casas del pueblo e incluso de día. No se apartan de la gente para nada, porque están acostumbrados ya a vernos, miran para ti, pero siguen matando ganado. No hay que olvidar que el lobo es un animal que no solo mata para comer, sino que está programado para matar, es un depredador nato y su obsesión es matar.
La ganadería extensiva está en peligro continuo, porque por mucho que se haga, ellos entran por donde sea. La situación es desesperante, que hace que mucha gente tire con todo y diga «se acabó». Ya no es solo económicamente, que es verdad que nos arruina, pero es mucho peor lo que supone anímicamente llegar allí y ver a tus animales muertos o malheridos, con las tripas a rastras y abiertos de cualquier manera.
–¿Cómo valoran la propuesta del PP en el Congreso para iniciar el debate para sacar al lobo del Lespre?
–Yo estuve allí porque quería mirar a la cara a los diputados asturianos del PSOE que aquí nos están diciendo que tienen esto recurrido en la Audiencia Nacional –como también lo tenemos en las organizaciones agrarias, en concreto COAG y Asaja– y que apoyan a los ganaderos pero, sin embargo, dejan que los diputados asturianos en el Congreso en Madrid voten en contra de esta propuesta. Lo mismo ocurre con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, que fue alcalde de Lena, un municipio muy afectado por los lobos que conoce en primera persona la situación y lo que supone el problema del lobo para la ganadería y para la gente de los pueblos. Que no lleguen diciendo que están de nuestro lado, que les preocupa el reto demográfico y que después lleguen allí y tengan la cara tan dura de votar en contra de una medida como esta.
Estamos contentos e ilusionados con que se abra este debate. Aunque va para largo, esto permitirá que se valoren todos los datos que están aportando las comunidades autónomas y que escuchen al sector de una puñetera vez. Cuando incluyeron al lobo en este listado se habían comprometido con las organizaciones agrarias a hablar del tema para ver de qué manera se hacían las cosas y no lo hicieron. De la noche a la mañana incluyeron al lobo en el Lespre, permitiendo que votaran comunidades autónomas que no tienen un lobo ni lo van a tener en su vida. Desde Madrid, desde Oviedo y desde cualquier ciudad se pueden ver las cosas de una manera, pero para eso hay que estar aquí con el ganado, hay que vivir de ello y hay que estar sufriendo cada día lo que está pasando y lo que estamos viendo. Habría que conseguir que todos, sobre todo la gente de las ciudades que se deja guiar por los ecologistas, se pudieran quedar aquí y ver y soportar lo que estamos viendo y viviendo. Nos llaman alarmistas, pero es que está en peligro ya la vida de la gente de los pueblos. Un perro, que es un animal doméstico, en un momento determinado puede incluso atacar a una persona. Un lobo que, como te decía antes, es un animal programado para matar, se cruza con una persona y dice «esto es comida», y esto puede pasar cualquier día.
Ahora el balón vuelve a estar en el tejado del PSOE, que es al que le corresponde ahora poner en marcha toda la maquinaria para poder sacar el lobo del Lespre, y es que incluso desde Bruselas se está diciendo que está en unas condiciones más que favorables y que se puede sacar, que la especie no corre ningún peligro. Nosotros tampoco estamos pidiendo en ningún momento la extinción de de la especie, pero sí que se necesitan unos controles poblacionales que sean soportables. Lo que estamos viendo es una sangría continua: animales malheridos, muertos o despeñados, porque los pobres salen en estampida cuando viene el lobo. Nos estamos jugando la soberanía alimentaria y el cuidado del territorio, porque si nosotros nos marchamos y abandonamos, a ver qué vamos a tener, porque el turismo va detrás y dejaría de venir a Asturias.
–¿Cómo justifica el PSOE de Asturias que voten en contra de sacar al lobo del Lespre sus diputados de Madrid?
–Ellos se escudan siempre en que el PSOE de Asturias y el Gobierno de Asturias están al lado de los ganaderos, en contra de la inclusión del lobo en el Lespre, a favor de que haya controles poblacionales... Pero después, los que están en Madrid van por su lado sin que ellos puedan ejercer sobre el voto de esta gente que es de Asturias, pero siguen el dictamen del partido a nivel nacional.
Si no pueden defender a quien los vota ni al territorio al que representan, que se vayan para su casa
A personas como la diputada Adriana Lastra se le llena la boca con Asturias porque necesita votos en Asturias, pero después hace lo contrario, nos vende miserablemente. Cualquier ganadero, viendo lo que vimos el otro día en el Congreso, si vuelve a llegar a pedirle el voto, le va a decir que se vaya para Madrid y que no se acerque a nadie en Asturias. Es una traidora como Hugo Morán y como el resto de parlamentarios socialistas asturianos que están en Madrid. Son unos traidores con Asturias, con el mundo rural, con los ganaderos, con la producción de alimentos... Que no vengan a vendernos más la moto. Si no pueden defender a quien los vota, ni a quien los apoya, ni al territorio al que representan, ¿qué demonios hacen ahí? ¡Que se vayan para su casa y se dediquen a otra cosa! El problema será que no tienen a qué dedicarse porque llevan en política toda la vida.
–¿Qué medidas proponen para acabar con estos ataques además de la exclusión del lobo del Lespre?
–Nosotros no tenemos animales para que los mate el lobo, ni por lo que nos pague la Consejería por los daños. Los tenemos para criarlos, para vida y para que otros vayan a producir leche o carne. Pero, en los casos en los que haya daños, que se paguen conforme a precio de mercado, que cubra el lucro cesante y que se paguen en tiempo y forma para que ese animal, aunque no es sustituible por otro, afecte lo mínimo posible a la explotación.
Por otro lado, pedimos que sigan poniendo partidas presupuestarias suficientes para establecer pues medidas de prevención, que son muy necesarias, como las que por primera vez se pusieron el año pasado en marcha para poder hacer cercados fijos, cercados móviles, perros mastines... Todo esto va a redundar en que se reduzcan los daños, pero la principal medida es el control poblacional. De ahí hay que partir, hay que reducir la población a unos límites que sean soportables.
Además de las pérdidas, a los ganaderos nos están suponiendo muchísimas horas de trabajo tener que estar a todas horas entre el ganado. Somos seres humanos que también necesitamos algún tiempo libre, algo de descanso. Y es que hay que estar atento porque si vas al día siguiente igual ya no tienes que presentar. Y si no tienes nada que presentar, no se cobra. De la misma forma, si el guarda no estipula la cantidad en el informe, sabemos que la Consejería no paga.
Es algo muy subjetivo y el guarda tiene la capacidad de decir si el ataque es de lobo o no. Hay muchos que hacen el trabajo muy bien hecho y merecen todo nuestro respeto, pero hay otros que en realidad son ecologistas disfrazados de guardas del Principado. Por tener esta cantidad desmesurada de lobos, ¡qué pérdida tan grande supone al sector y qué pérdida tan grande supone a la sociedad! Con ese millón y pico que se está pagando para compensar mínimamente los daños se podían hacer muchas cosas y muy necesarias para todos.