Una sonda europea viajará en octubre al asteroide que desvió una nave 'kamikaze' en 2022
La misión Hera analizará el impacto y las consecuencias que tuvo el primer ensayo de defensa planetaria jamás realizado
Esta semana se han cumplido dos años desde que una sonda del tamaño de una nevera impactara a más de 20.000 km/h contra un asteroide semejante en magnitud a la Gran Pirámide de Guiza con la intención de desviarlo.
La misión DART (siglas en inglés de ‘Prueba de Redirección de Asteroide Binario’) fue el primer simulacro de defensa planetaria jamás realizado, y resultó todo un éxito. El propósito era comprobar qué efectos tendría una maniobra así con la intención de desviar un objeto que se dirigiera peligrosamente hacia la Tierra.
La brutal colisión superó las mejores expectativas. Al chocar contra Dimorphos (un asteroide de 160 metros de diámetro que orbita a otro más grande —780 metros— llamado Didymos), el tiempo de órbita se redujo de las 11 horas y 55 minutos iniciales a 11 y 23, esto es, 32 minutos menos. La marca fue muy superior al mínimo de 73 segundos que la NASA, impulsora de la misión, consideraba necesario para que la operación se pudiese considerar exitosa.
Aunque en estos dos años los científicos han estudiado a fondo el impacto y sus consecuencias con los datos obtenidos mediante distintos aparatos —incluido un satélite LICIACube que acompañó al vehículo para registrar con detalle lo que ocurría—, una nueva sonda viajará ahora hasta el sistema asteroidal para analizar de cerca su estado actual.
El segundo y último acto de esta exhaustiva investigación se llama Hera, está impulsada en esta ocasión por la Agencia Espacial Europea (ESA) y tiene previsto partir hacia Didymos-Dimorphos este mes de octubre (con el día 7 como fecha preliminar).
Armada de diversos instrumentos de medición de aspectos como el tamaño, la masa, la forma, la composición y la estructura de ambos objetos, Hera llegará a su destino dentro de dos años, en 2026. Allí, estudiará y mapeará con detalle el cráter resultante del impacto contra Dimorphos, así como la nube de escombros en expansión causada por el choque. Durante el viaje, también probará tecnología avanzada de navegación autónoma en el espacio profundo.
En total, la sonda tiene una masa de 1.128 kilogramos, mide 1,6 × 1,6 × 1,7 metros y lleva una carga útil compuesta por cámaras, un altímetro y un espectrómetro, además de dos nanosatélites CubeSats que aterrizarán sobre la superficie de los asteroides para estudiarlos con gran detalle. En total, la duración planeada de la misión será de unos seis meses.
Hera y DART forman en su conjunto la misión global AIDA (Evaluación de Impacto y Desviación de Asteroide), fruto de la colaboración entre la NASA y la ESA.