El día en el que Leonardo DiCaprio fue objetivo de José Luis Moreno

La declaración de Alejandro Roemmers, el exsocio de José Luis Moreno se ha hecho esperar, aunque lo cierto es que ya ha tenido lugar. Fue el pasado miércoles 9 de marzo cuando ratificó ante el juez que está al frente del caso Titella, una investigación judicial que sitúa al productor de televisión como el principal imputado.

El testimonio del empresario argentino parece que será decisivo para dictar sentencia, a pesar de que el interrogatorio se enfocó a todos los enigmas derivados de Glow and Darkness, una serie comúnmente conocida como Resplandor y tinieblas, inspirada en San Francisco de Asís, que Roemmers define como «mediocre» por el hecho de que, a su parecer, la parte más espiritual de la producción audiovisual era insuficiente, algo que venía propiciado por la falta de fe del productor de Escenas de matrimonio y también por su falta de conocimiento con respecto al tema.

Alejandro Roemmers asegura que Moreno le estafó 35 millones de euros, la cantidad de dinero que el argentino depositó para financiar un proyecto en el que la producción recayó en manos del ventrílocuo. Al parecer, José Luis le hizo creer a Roemmers que la serie se iba a convertir en algo similar a Juego de tronos cuando realmente se asemejó más a «una telenovela de tarde».

Del mismo modo, aclaró que otro de los motivos por los que se sintió engañado por el ventrílocuo fue por la seguridad que este le transmitió a la hora de vender la serie a diferentes plataformas, algo que nunca sucedió. Explicó y justificó la confianza depositada en él alegando que contó con Moreno porque le hizo creer que era de las pocas personas capaces de colocar la serie en Amazon por la desorbitada cifra de cinco millones de euros por capítulo.

Y es que la declaración del argentino ha venido acompañada de una gran revelación. Con sus palabras, el empresario ha dado los datos de una de las personas con la que quería contar Moreno para este polémico proyecto que tanto ha dado de qué hablar. Su objetivo no era otro que Leonardo DiCaprio, ya que a la hora de elegir el casting se plantearon contar con las grandes estrellas de Hollywood. No obstante, terminaron desechando esta posibilidad por motivos, hasta ahora desconocidos.

Alejandro también reconoció ante el juez que su propósito no era obtener rendimiento económico de la producción, sino crear un proyecto donde el amor acaparara gran parte del protagonismo. Finalmente, no pudo lograr su cometido por culpa del productor televisivo, al que culpabiliza de hacer capítulos defectuosos cuyo guion no se ajustaba nada al resultado que él demandaba. En definitiva, una versión que nada tiene que ver con la ofrecida por José Luis Moreno.

Lo único cierto es que la Guardia Civil acusa al productor de apropiarse de, al menos, la mitad del dinero que le dio Roemmers para costear los rodajes de la serie.

La investigación sobre el caso Titella sigue abierta pendiente de dar respuesta a todos aquellos enigmas que se esconden bajo un entramado policial que aún está pendiente de resolver, pero que apunta maneras a que no tendrá un final feliz para el criticado productor español.